30 años sin el motor del Zeppelin
Viernes, 24 septiembre 2010, 18:21
Por Enrique Bernaola
Hace 30 años, un sábado como éste, nos dejó el que es, personalmente, el mejor batería de todos los tiempos en la historia de la música. El gran John Bonham moría víctima de una borrachera que dejó una dura resaca en los más nostálgicos fans de Led Zeppelin. Ésta es su historia...
John Henry ‘Bonzo’ Bonham nació un 31 de mayo de 1948 en la localidad inglesa de Redditch. Desde sus más tiernos años, el pequeño John comenzó a interesarse por la percusión destrozando cajas de café, pero no sería hasta que cumplió los 14 cuando tuvo su primera batería.
Era en ese momento cuando su carrera daba sus primeros pasos. Tras tocar con varias bandas locales, se une finalmente a una de blues llamada Crawling King Snakes, donde conocería a un tal Robert Plant. Ninguno de los dos sabía entonces que su unión cambiaría el curso de la historia del rock.
Bonham pronto se hizo famoso por su extrema dureza a la hora de tocar la batería, lo que hizo que su talento no fuera apreciado por dueños de estudios, como uno de Birmingham que le dijo que así jamás llegaría a ningún lado. Años más tarde, el propio Bonham envió a la persona en cuestión una nota que rezaba: “Thanks for the career advice”, junto con un disco de oro de Led Zeppelin.
Su estrellato llegó cuando conoció en 1968, y gracias a su amigo Plant, a Jimmy Page y a John Paul Jones. Es en ese momento cuando nace Led Zeppelin con un Bonham que se convertiría en una pieza clave de su sonido. Sus solos de batería podían alargarse hasta la media hora y, a menudo, terminaba sus recitales tocando con las manos.
Con la que es una de las bandas más importantes en la historia del rock, Bonham grabó un total de ocho álbumes de estudio, en los que el éxito siempre fue una constante. Y gran parte de culpa fue de ‘Bonzo’, que cambió la manera de tocar la batería de la época, acostumbrada a ritmos más cercanos al blues y el jazz. Él imprimió otra forma más agresiva, con menos melodía y un ritmo tan aplastante y demoledor como frenético en su manejo con las baquetas.
Pero el destino le guardó un triste final. El 25 de septiembre de 1980, el tambor de su corazón dejó de sonar, víctima de una gran borrachera. Bonham se dirigía a unos ensayos para preparar una inminente gira por Estados Unidos y por el camino se iba parando en diferentes pubs para beber vodka.
Después se dirigió a la casa que Jimmy Page tenía a las orillas del Lago Ness, la misteriosa Boleskine House, donde siguió bebiendo. Se dice que se llegó a tomar unos 40 vodkas en apenas 12 horas, lo que le provocó un desmayo, con lo que sus compañeros de fiesta le acostaron en la cama. Al día siguiente, el bajista, John Paul Jones, se lo encontró en la cama sin pulso. Había muerto después de tragarse su propio vómito.
Así se despedía el ‘oso’, como le apodaban algunos, a la edad de 32 años y dejando un legado impresionante que ha servido de inspiración e influencia en infinidad de baterías hasta nuestros días. 30 años sin el motor de un Zeppelin que en 2007 volvió a volar con su hijo Jason Bonham al timón de la batería, en una reunión que posiblemente nunca se repita.
http://www.tiramillas.net/blogs/unblogged/2010/09/24/30-anos-sin-el-motor-del-zeppelin.html
Viernes, 24 septiembre 2010, 18:21
Por Enrique Bernaola
Hace 30 años, un sábado como éste, nos dejó el que es, personalmente, el mejor batería de todos los tiempos en la historia de la música. El gran John Bonham moría víctima de una borrachera que dejó una dura resaca en los más nostálgicos fans de Led Zeppelin. Ésta es su historia...
John Henry ‘Bonzo’ Bonham nació un 31 de mayo de 1948 en la localidad inglesa de Redditch. Desde sus más tiernos años, el pequeño John comenzó a interesarse por la percusión destrozando cajas de café, pero no sería hasta que cumplió los 14 cuando tuvo su primera batería.
Era en ese momento cuando su carrera daba sus primeros pasos. Tras tocar con varias bandas locales, se une finalmente a una de blues llamada Crawling King Snakes, donde conocería a un tal Robert Plant. Ninguno de los dos sabía entonces que su unión cambiaría el curso de la historia del rock.
Bonham pronto se hizo famoso por su extrema dureza a la hora de tocar la batería, lo que hizo que su talento no fuera apreciado por dueños de estudios, como uno de Birmingham que le dijo que así jamás llegaría a ningún lado. Años más tarde, el propio Bonham envió a la persona en cuestión una nota que rezaba: “Thanks for the career advice”, junto con un disco de oro de Led Zeppelin.
Su estrellato llegó cuando conoció en 1968, y gracias a su amigo Plant, a Jimmy Page y a John Paul Jones. Es en ese momento cuando nace Led Zeppelin con un Bonham que se convertiría en una pieza clave de su sonido. Sus solos de batería podían alargarse hasta la media hora y, a menudo, terminaba sus recitales tocando con las manos.
Con la que es una de las bandas más importantes en la historia del rock, Bonham grabó un total de ocho álbumes de estudio, en los que el éxito siempre fue una constante. Y gran parte de culpa fue de ‘Bonzo’, que cambió la manera de tocar la batería de la época, acostumbrada a ritmos más cercanos al blues y el jazz. Él imprimió otra forma más agresiva, con menos melodía y un ritmo tan aplastante y demoledor como frenético en su manejo con las baquetas.
Pero el destino le guardó un triste final. El 25 de septiembre de 1980, el tambor de su corazón dejó de sonar, víctima de una gran borrachera. Bonham se dirigía a unos ensayos para preparar una inminente gira por Estados Unidos y por el camino se iba parando en diferentes pubs para beber vodka.
Después se dirigió a la casa que Jimmy Page tenía a las orillas del Lago Ness, la misteriosa Boleskine House, donde siguió bebiendo. Se dice que se llegó a tomar unos 40 vodkas en apenas 12 horas, lo que le provocó un desmayo, con lo que sus compañeros de fiesta le acostaron en la cama. Al día siguiente, el bajista, John Paul Jones, se lo encontró en la cama sin pulso. Había muerto después de tragarse su propio vómito.
Así se despedía el ‘oso’, como le apodaban algunos, a la edad de 32 años y dejando un legado impresionante que ha servido de inspiración e influencia en infinidad de baterías hasta nuestros días. 30 años sin el motor de un Zeppelin que en 2007 volvió a volar con su hijo Jason Bonham al timón de la batería, en una reunión que posiblemente nunca se repita.
http://www.tiramillas.net/blogs/unblogged/2010/09/24/30-anos-sin-el-motor-del-zeppelin.html
Led Zeppelin - Moby Dick (Bonzo Drum Solo) (Live at Royal Albert Hall 1970)