Biografía de John Coltrane
Texto: © José Francisco Tapiz
Aunque han pasado más de cuarenta años desde que el 17 de julio de 1967 falleciese el saxofonista John Coltrane, su figura sigue siendo una de las más importantes en la actualidad en el mundo del jazz. Su influencia ha sido decisiva en la mayoría de los músicos que han venido tras él e incluso en la propia concepción del jazz. Aparte de las discusiones sobre cuál de las fases de su carrera es más interesante, sobre cuál es su mejor disco o solo, e incluso sobre si lo que hacía al final de su carrera era jazz o no, entre los aficionados una de las preguntas recurrentes es hacia dónde habría evolucionado su música (y con ella el jazz) si no hubiera fallecido a una edad tan temprana.
La influencia de Coltrane no solo queda restringida a los músicos o aficionados, sino que llega a ámbitos tan poco relacionados con la música como es el de la religión. Si uno le echa un vistazo a Trane Tracks. The Legacy of John Coltrane (Eforfilms), el primer entrevistado que se encontrará allí no va a ser un familiar, amigo o músico colega del saxofonista. Quien aparece en primer lugar es el obispo Franzo Wayne King de la iglesia ortodoxa africana San John Coltrane de San Francisco.
Más allá de todas estas consideraciones, John Coltrane fue un músico de jazz que en 20 años aproximadamente desarrolló una carrera en la que fue quemando etapas, una tras otra, evitando acomodarse en sus logros, situándose en la vanguardia del jazz. He aquí una aproximación a su carrera.
John William Coltrane nació el 23 de septiembre de 1926 en Hamlet, un pequeño pueblo de Carolina del Norte. Al poco tiempo su familia se trasladó a High Point, una localidad de mayor tamaño en donde vivió rodeado de parientes. Su familia era de clase media. Su padre era sastre y su madre costurera y empleada de hogar. Ambos tenían interés por la música: su madre había cursado estudios superiores y cantaba y tocaba el piano, mientras que su padre tocaba el violín, el ukelele y posiblemente el clarinete. Sus dos abuelos eran sacerdotes, lo que hizo que creciera en un entorno en el que a la música que tocaban sus padres se unían la música religiosa, el country-blues de los músicos callejeros y el swing del jazz de las emisiones radiofónicas que sin demasiada facilidad lograban captar en el receptor que tenían en casa. Su abuelo materno, William Blair, era también un líder de la comunidad. Él fue el responsable de la apertura de la primera escuela para negros en High Point.
Con la llegada al instituto, el joven Coltrane será consciente de que a pesar de la política conocida como “separados pero iguales” (High Point era de hecho una ciudad segregada), había un racismo en la sociedad que se reflejaba en unos uniformes escolares andrajosos o en los libros de texto donados por escuelas para blancos, que recibían una mayor cantidad de fondos públicos. En 1939 comienza a tocar el clarinete. Al año siguiente cambia al saxo alto, a la vez que canta en algunos grupos escolares. En 1939 su padre muere de cáncer de estómago. Su madre se traslada a New Jersey y Coltrane permanece en High Point hasta que en 1943 se gradúa y se traslada a Filadelfia, donde encuentra trabajo en una fábrica. A partir de 1944 y durante un año Coltrane recibe lecciones de saxofón y clases de teoría musical. En sus inicios había sido un admirador de Lester Young y de Johnny Hodges, hasta que el 5 de junio de 1945 ve actuar al trompetista Dizzy Gillespie junto al saxofonista Charlie Parker, “Bird”. A partir de ese momento Bird será su nuevo ídolo.
En agosto de 1945 es llamado a filas y enviado a la marina, a Pearl Harbour, donde permanecerá un año. Allí forma parte de la banda de color The Melody Masters tocando el saxofón y el clarinete. Graba por primera vez en 1946 con algunos músicos de la base naval unos cuantos temas, entre los que se incluyen un puñado de versiones de Charlie Parker. Con apenas 19 años se escucha a un músico hábil pero no muy habituado a los complicados acordes que caracterizaban al be bop.
Tras licenciarse retoma las lecciones de música y continúa con sus estudios hasta principios de los años cincuenta, tanto con un profesor fijo cuando está en su ciudad, como con clases particulares de distintos músicos profesionales.
En 1946 logra su primer trabajo profesional, con Joe Webb en Filadelfia, y en 1947 va de gira con King Kolax entre febrero y abril. Entre mayo del 47 y finales del 48 trabaja como músico freelance, a menudo con la big band de Jimmy Heath.
En 1948 Coltrane ya bebía demasiado, fumaba unos dos paquetes diarios de cigarrillos y ya había probado la heroína. Estos hábitos causaron que profesionalmente no fuera un músico suficientemente consistente y es probable que fueran algunos de los factores principales en la escasa relevancia que caracteriza a su carrera durante los siete años siguientes.
En noviembre del año 1948 y abril o mayo de 1949 trabaja con Eddie “Cleanhead” Vinson y cambia del saxo alto al saxo tenor. En ese momento, sus influencias en ese instrumento son Lester Young, Coleman Hawkins, Dexter Gordon, Wardell Gray y Sonny Stitt.
En septiembre de 1949 entra a tocar el alto en la big band de Dizzy Gillespie. La banda se disuelve en junio de 1950, aunque el trompetista lo recupera en agosto de ese año –al tenor– para su nueva formación en sexteto. Es en esa época cuando realiza sus primeras grabaciones comerciales con Gillespie, de quien aprende sobre armonías sofisticadas y también sobre música latina. Mientras tanto, tal y como hará a lo largo de su carrera, estudia y practica continuamente.
En 1951 está de nuevo en Filadelfia actuando como músico freelance o con un grupo de ex-miembros de la banda de Dizzy Gillespie. Continúa estudiando y practicando implacablemente, recibiendo lecciones regularmente y estudiando con colegas músicos para intercambiar ideas musicales. Entre abril y diciembre de 1952 va de gira con Earl Bostic, de quien dijo “me enseñó un montón de cosas al saxo”. En 1953 parece que trabaja como músico en Filadelfia y sus alrededores, y en 1954 se une a su antiguo ídolo Johnny Hodges. Tras dejarle a finales del 54, vuelve a trabajar en los alrededores de Filadelfia, hasta que en 1955 se une al organista Jimmy Smith. Es en esa época cuando suceden dos hechos fundamentales en su vida: se casa por primera vez y es descubierto por Miles Davis.
Texto: © José Francisco Tapiz
Aunque han pasado más de cuarenta años desde que el 17 de julio de 1967 falleciese el saxofonista John Coltrane, su figura sigue siendo una de las más importantes en la actualidad en el mundo del jazz. Su influencia ha sido decisiva en la mayoría de los músicos que han venido tras él e incluso en la propia concepción del jazz. Aparte de las discusiones sobre cuál de las fases de su carrera es más interesante, sobre cuál es su mejor disco o solo, e incluso sobre si lo que hacía al final de su carrera era jazz o no, entre los aficionados una de las preguntas recurrentes es hacia dónde habría evolucionado su música (y con ella el jazz) si no hubiera fallecido a una edad tan temprana.
La influencia de Coltrane no solo queda restringida a los músicos o aficionados, sino que llega a ámbitos tan poco relacionados con la música como es el de la religión. Si uno le echa un vistazo a Trane Tracks. The Legacy of John Coltrane (Eforfilms), el primer entrevistado que se encontrará allí no va a ser un familiar, amigo o músico colega del saxofonista. Quien aparece en primer lugar es el obispo Franzo Wayne King de la iglesia ortodoxa africana San John Coltrane de San Francisco.
Más allá de todas estas consideraciones, John Coltrane fue un músico de jazz que en 20 años aproximadamente desarrolló una carrera en la que fue quemando etapas, una tras otra, evitando acomodarse en sus logros, situándose en la vanguardia del jazz. He aquí una aproximación a su carrera.
John William Coltrane nació el 23 de septiembre de 1926 en Hamlet, un pequeño pueblo de Carolina del Norte. Al poco tiempo su familia se trasladó a High Point, una localidad de mayor tamaño en donde vivió rodeado de parientes. Su familia era de clase media. Su padre era sastre y su madre costurera y empleada de hogar. Ambos tenían interés por la música: su madre había cursado estudios superiores y cantaba y tocaba el piano, mientras que su padre tocaba el violín, el ukelele y posiblemente el clarinete. Sus dos abuelos eran sacerdotes, lo que hizo que creciera en un entorno en el que a la música que tocaban sus padres se unían la música religiosa, el country-blues de los músicos callejeros y el swing del jazz de las emisiones radiofónicas que sin demasiada facilidad lograban captar en el receptor que tenían en casa. Su abuelo materno, William Blair, era también un líder de la comunidad. Él fue el responsable de la apertura de la primera escuela para negros en High Point.
Con la llegada al instituto, el joven Coltrane será consciente de que a pesar de la política conocida como “separados pero iguales” (High Point era de hecho una ciudad segregada), había un racismo en la sociedad que se reflejaba en unos uniformes escolares andrajosos o en los libros de texto donados por escuelas para blancos, que recibían una mayor cantidad de fondos públicos. En 1939 comienza a tocar el clarinete. Al año siguiente cambia al saxo alto, a la vez que canta en algunos grupos escolares. En 1939 su padre muere de cáncer de estómago. Su madre se traslada a New Jersey y Coltrane permanece en High Point hasta que en 1943 se gradúa y se traslada a Filadelfia, donde encuentra trabajo en una fábrica. A partir de 1944 y durante un año Coltrane recibe lecciones de saxofón y clases de teoría musical. En sus inicios había sido un admirador de Lester Young y de Johnny Hodges, hasta que el 5 de junio de 1945 ve actuar al trompetista Dizzy Gillespie junto al saxofonista Charlie Parker, “Bird”. A partir de ese momento Bird será su nuevo ídolo.
En agosto de 1945 es llamado a filas y enviado a la marina, a Pearl Harbour, donde permanecerá un año. Allí forma parte de la banda de color The Melody Masters tocando el saxofón y el clarinete. Graba por primera vez en 1946 con algunos músicos de la base naval unos cuantos temas, entre los que se incluyen un puñado de versiones de Charlie Parker. Con apenas 19 años se escucha a un músico hábil pero no muy habituado a los complicados acordes que caracterizaban al be bop.
Tras licenciarse retoma las lecciones de música y continúa con sus estudios hasta principios de los años cincuenta, tanto con un profesor fijo cuando está en su ciudad, como con clases particulares de distintos músicos profesionales.
En 1946 logra su primer trabajo profesional, con Joe Webb en Filadelfia, y en 1947 va de gira con King Kolax entre febrero y abril. Entre mayo del 47 y finales del 48 trabaja como músico freelance, a menudo con la big band de Jimmy Heath.
En 1948 Coltrane ya bebía demasiado, fumaba unos dos paquetes diarios de cigarrillos y ya había probado la heroína. Estos hábitos causaron que profesionalmente no fuera un músico suficientemente consistente y es probable que fueran algunos de los factores principales en la escasa relevancia que caracteriza a su carrera durante los siete años siguientes.
En noviembre del año 1948 y abril o mayo de 1949 trabaja con Eddie “Cleanhead” Vinson y cambia del saxo alto al saxo tenor. En ese momento, sus influencias en ese instrumento son Lester Young, Coleman Hawkins, Dexter Gordon, Wardell Gray y Sonny Stitt.
En septiembre de 1949 entra a tocar el alto en la big band de Dizzy Gillespie. La banda se disuelve en junio de 1950, aunque el trompetista lo recupera en agosto de ese año –al tenor– para su nueva formación en sexteto. Es en esa época cuando realiza sus primeras grabaciones comerciales con Gillespie, de quien aprende sobre armonías sofisticadas y también sobre música latina. Mientras tanto, tal y como hará a lo largo de su carrera, estudia y practica continuamente.
En 1951 está de nuevo en Filadelfia actuando como músico freelance o con un grupo de ex-miembros de la banda de Dizzy Gillespie. Continúa estudiando y practicando implacablemente, recibiendo lecciones regularmente y estudiando con colegas músicos para intercambiar ideas musicales. Entre abril y diciembre de 1952 va de gira con Earl Bostic, de quien dijo “me enseñó un montón de cosas al saxo”. En 1953 parece que trabaja como músico en Filadelfia y sus alrededores, y en 1954 se une a su antiguo ídolo Johnny Hodges. Tras dejarle a finales del 54, vuelve a trabajar en los alrededores de Filadelfia, hasta que en 1955 se une al organista Jimmy Smith. Es en esa época cuando suceden dos hechos fundamentales en su vida: se casa por primera vez y es descubierto por Miles Davis.
Con Miles Davis: Primera etapa
El 27 de septiembre de 1955 comienza a trabajar para Davis. Quizás reforzado por esa seguridad, el 3 de octubre se casa con Juanita “Naima” Austin, una madre soltera con una hija de nombre Syeeda. Ambas serán homenajeadas en sendas composiciones del saxofonista: la primera se convertirá en una de sus baladas más bellas y famosas, "Naima", mientras que a la segunda le dedicará “Syeeda’s Song Flute”.
En esa época Coltrane va a pasar de tener apenas unas pocas grabaciones comerciales a grabar con Miles Davis para Prestige (un pequeño sello independiente) y Columbia (una de las grandes compañías). Para el primer sello grabará a su nombre y como acompañante de otros músicos habituales de Prestige.
A pesar de estar realizadas en la misma época, las grabaciones en Prestige y Columbia son muy diferentes entre sí. Prestige no tenía mucho dinero para producirlas, por lo cual en sus sesiones imperaba lograr tomas a la primera y grabar la mayor cantidad de material posible. Esto provocaba a su vez que en los temas grabados abunden composiciones no muy complicadas (que no necesitaban muchas tomas o ensayos previos) como standards y blues. Por el contrario, en Columbia el trabajo era menos espontáneo: se grababa tanto como fuera necesario y en muchos casos los temas estaban construidos a partir de los mejores momentos de las diferentes tomas. A pesar de ello hay grabaciones como el mítico Kind Of Blue (Miles Davis, Columbia) en las que el disco se grabó sin recurrir a la técnica del “repetir, cortar y pegar”.
Para hacerse una idea del montante que supone el material al que nos estamos refiriendo, la caja a nombre de John Coltrane titulada The Prestige Recordings, en la que se recogía el material grabado por este sello entre mayo de 1956 y diciembre de 1958, está compuesta por 16 compactos; obsérvese que le falta el Complete al uso, ya que sus colaboraciones con Miles Davis se incluían en sus Complete Prestige Recordings. Actualmente las colaboraciones con Davis en ese sello están recogidas en Miles Davis - The Legendary Prestige Quintet Sessions (Prestige - Concord) con cuatro compactos más que están grabados entre 1955 y 1958. El material de Columbia está recogido en la caja a nombre de Miles Davis - John Coltrane titulada The Complete Columbia Recordings 1955-1961 (a pesar de que salvo dos temas el resto del material está grabado entre el 55 y el 59). En definitiva y resumiendo, estamos hablando de más de 20 compactos bien repletos de una música que fue grabada en poco más de cuatro años por un músico que hasta ese momento apenas había aparecido en unas pocas grabaciones.
Esta es una fase ciertamente interesante de su carrera. Resulta paradójico que mientras algunas de las grabaciones con Miles Davis en Columbia como "Round About Midnight” (en el disco del mismo título) sean calificadas como obras maestras, su paso por Prestige se considere como una fase temprana o de formación. Fearless Leader (Prestige/Concord), editada a nombre de John Coltrane, es una caja de seis compactos publicada en 2006 con un sonido muy mejorado respecto al de la anteriormente citada The Prestige Recordings. En ella se recogen únicamente las sesiones como líder del saxofonista en Prestige, a partir de las que se editaron en su momento once LP. Allí se escucha a un saxofonista que aunque todavía no estaba en la senda de las revoluciones musicales por las que sería conocido, tocaba con gran virtuosismo, autoridad y pasión. No parece arriesgado afirmar que si su carrera hubiese detenido su evolución estilística en esos momentos ya se tendría que hablar de un músico básico en la historia del jazz.
No obstante, el hecho de que un músico como Coltrane integrase el grupo de un trompetista de primera fila como Miles Davis para sustituir a Sonny Rollins provocó entre una parte de la prensa un cierto escepticismo sobre lo apropiado de la elección por parte de Davis. En una entrevista, el propio Coltrane reconocía que no sabía muy bien por qué Miles Davis lo había elegido. Sin entrar en otro tipo de consideraciones, hay que reconocer que si algo tuvo Miles Davis a lo largo de toda su vida artística, fue un excelente olfato a la hora de elegir a sus acompañantes. En este caso esa capacidad parece que estaba ya bien desarrollada en una fase tan temprana de su carrera, ya que en esos momentos no tenía ni 30 años.
De cualquier modo y a pesar de que este grupo fue reconocido ganando casi todos los premios otorgados por la prensa especializada del jazz, el alcohol y la adicción a la heroína de Coltrane estaban interfiriendo en su labor de músico. El 28 de abril de 1957 Davis (ex heroinómano) lo despide de su grupo, siendo sustituido nuevamente por Rollins. Parece ser que esto provocó que Coltrane reflexionase sobre su situación personal y en mayo de ese mismo año logró desengancharse de la heroína. En las notas de A Love Supreme se refiere a esta situación indicando que "en 1957 se produjo en él por la gracia de Dios un despertar espiritual que le llevó a una vida más productiva, rica y plena".
Sus planes en esos momentos eran liderar sus propios grupos y es el 31 de mayo de ese año cuando realiza la primera sesión a su nombre en Prestige, que se recogerá en el disco titulado Coltrane. Entre los temas incluidos hay uno con el esclarecedor título “Straight Street” (el camino recto).
Desarrolando el sonido: Thelonious Monk
Es en este periodo cuando surge una asociación con Thelonious Monk que será especialmente importante en la vida artística del saxofonista. En abril de 1957 graba un primer tema con el pianista y comienza una relación artística con Monk que consistía en visitas al domicilio del pianista para experimentar tocando de un modo informal. Es por esa época cuando el saxofonista comienza a trabajar la técnica de los multiphonics, consistente en hacer sonar varias notas a la vez. Coltrane llegó a comentar que Monk miraba su saxo y le hacía sentir los mecanismos que tenía que activar para conseguir ese efecto. Sin embargo, Trane (sobrenombre de Coltrane) aprendió las bases de esta técnica de John Glenn, un músico local de Filadelfia.
Esta magnífica relación se concretará en una estancia de Coltrane en el grupo de Monk en el Five Spot de Nueva York desde finales de julio hasta finales de diciembre. Son apenas 6 meses en los que el saxofonista sufre una tremenda evolución en su sonido. Todo esto se puede apreciar en los discos grabados en estudio y editados en Riverside Thelonious Himself, Thelonious Monk With John Coltrane y Monk’s Music (disponibles en Thelonious Monk With John Coltrane – The Complete 1957 Riverside Recordings). Especialmente aconsejable es el disco editado por Blue Note en 2005 a partir de unas cintas descubiertas por casualidad en la Biblioteca del Congreso estadounidense en el proceso de digitalización de las grabaciones de los programas de La Voz de América, de título Thelonious Monk Quartet With John Coltrane At Carnegie Hall. Sólo por el inicio del concierto con Thelonious Monk y John Coltrane mano a mano en “Monk’s Mood” esta obra merece el calificativo de monumento artístico en la carrera de ambos genios. La otra grabación en directo conocida de ambos músicos se editó inicialmente como Live At The Five Spot Discovery! a nombre de The Thelonious Monk Quartet feat. John Coltrane en Blue Note, indicando el final del verano del 57 como fecha de grabación, a partir de unas cintas grabadas de modo no profesional por Naima Coltrane. Sin embargo, posteriormente se ha averiguado que dicho concierto se grabó el 11 de septiembre de 1958, cuando Coltrane ya estaba fuera del cuarteto de Monk, actuando en el grupo como invitado en sustitución de Johnny Griffin, su sucesor en el citado cuarteto. Dicha grabación (en la que se incluyen dos temas inéditos respecto de la publicada inicialmente) se encuentra editada a nombre de Thelonious Monk Quartet with John Coltrane con el título Complete Live At The Five Spot 1958 en Gambit Records.
En plena estancia con Monk, en septiembre de 1957, Coltrane graba en Blue Note el que va a ser su mejor disco hasta ese momento: Blue Train. En esta grabación compone cuatro de los cinco temas y toca en su mejor nivel hasta esa fecha, a lo que ayudan sin duda las mejores condiciones para la grabación, que se traducen en una obra no realizada a base de primeras y únicas tomas. En esos momentos tanto la interpretación como la composición se van a convertir en dos objetivos igualmente importantes para Coltrane, quien seguía a la búsqueda del modo de poder desarrollar su música en sus propios grupos.
De vuelta con Miles
A principios de enero de 1958 Miles Davis vuelve a contratar a Coltrane. En ese momento es un saxofonista totalmente diferente al que el trompetista había despedido apenas hacía nueve meses. Además de superar su adicción a la heroína se produce un gran cambio tanto en su forma de tocar como en la música que crea. Para darse cuenta de ello no hay más que comparar las grabaciones en Prestige realizadas en la época de su primer encuentro (Workin’, Steamin’, Relaxin’, Cookin’) con Blue Train, los discos con Miles en Columbia o los que editará a su nombre en Prestige. Es en esta época cuando el crítico Ira Gitler acuña el término “láminas de sonido” (sheets of sound) para describir uno de los recursos más característicos presentes en el sonido del saxofonista.
Un factor importante en esta evolución musical va a ser Miles Davis, quien en esa época estaba también en una fase de búsqueda sonora. Para esto contará en su grupo, además de con Trane, con el saxofonista Cannonball Adderley y con el pianista Bill Evans.
En octubre de 1958 se produce un encuentro con Cecil Taylor, el pianista por excelencia de la vanguardia jazzística, la de entonces y la de ahora. El disco se grabó y publicó originalmente en United Artist como Hard Driving Jazz; posteriormente Blue Note lo editó a nombre de Coltrane con el título Coltrane Time. Sin embargo, y aunque estamos ante dos figuras revolucionarias del jazz, su encuentro se caracterizó por un gran respeto mutuo y una tremenda contención. Tal es así que el músico más destacado en esta grabación es el trompetista Kenny Dorham.
En la primavera de 1959 Coltrane participará en dos de las grabaciones más famosas de su carrera: Kind Of Blue (Columbia) de Miles Davis y Giant Steps (Atlantic). Con Kind Of Blue Miles Davis popularizó el jazz modal: un estilo más abierto, basado en escalas, que permitía a los músicos improvisar de un modo más libre que como se había hecho hasta entonces. Todas las composiciones de este disco se pueden calificar como clásicos, pero entre ellos destaca especialmente “So What”. Este tema abría el disco suavemente con las notas del piano de Bill Evans y el contrabajo de Paul Chambers. A continuación Chambers exponía el tema (apenas unas notas). A éste se le unía la sutil batería de Jimmy Cobb para finalmente dar paso al solo de trompeta de Miles Davis, seguido por los solos de Coltrane, Adderley, Evans y Chambers, para finalizar tan suavemente como comenzó. El resultado es pura magia en poco más de nueve minutos.
A pesar de todo ello, Coltrane, como se ha indicado, estaba deseando dirigir sus propios grupos. No obstante, Miles Davis se las arregló para retenerlo en su grupo hasta abril de 1960. Debido a que Coltrane no tenía apenas ninguna experiencia anterior como líder, Davis le convenció de que lo que más le convenía era un periodo de transición. De ese modo el mánager del trompetista pasó a serlo también de Coltrane y gracias a él consiguió un contrato con Atlantic bastante más lucrativo que el que anteriormente había firmado con Prestige. Además, el agente de Miles también trabajó para Coltrane consiguiéndole conciertos en los periodos en que el sexteto de Davis permanecía inactivo.
De cualquier modo esta estancia en el grupo de Miles (un superventas del jazz) y sus empeños en continuar evolucionando estilísticamente van a suponer una serie de desencuentros de Coltrane con el público. Especialmente notables son los conciertos en París en marzo de 1960, en los que el público abucheó su participación debido a que lo que Coltrane les ofrecía estaba ya muy lejos de lo que ese mismo músico había grabado apenas unos meses antes. A pesar de ello, al año siguiente ese mismo público ya estará preparado para recibir su música. Esta gira europea, realizada a regañadientes, también dará lugar a algún desencuentro con el propio Davis. En el concierto del 9 de abril de ese año en Holanda (Miles Davis Quintet – Live In Den Haag disponible en LoneHill Jazz), el penúltimo de la gira europea, es palpable la tensión. Por un lado Coltrane da la impresión de estar con la mente en otra parte, deseando echar a volar libre, con unos solos que en muchos casos duplican en duración a los de Davis, el líder de la formación. Para ello no hay más que escuchar la versión de “So What” (tocada a un tempo bastante más rápido que el del tema original), que alcanza casi los 18 minutos con Coltrane apuntando hacia el infinito. Por otra parte, entre ambos músicos se produce uno de esos desencuentros en un tema fetiche para el trompetista como “’Round Midnight”. No obstante, si uno acude a la grabación del concierto del día anterior en Zurich (Live In Zurich, Gambit Records), se encuentra a los músicos trabajando a placer: tres de los cuatro temas superan largamente el cuarto de hora de duración. A pesar de estas circunstancias, una vez regresan a los Estados Unidos Coltrane se despide del grupo. Ambos músicos sólo volverían a coincidir el año siguiente para la grabación de un par de temas (“Someday My Prince Will Come” y “Teo”) a nombre de Davis en Columbia.
Atlantic: nueva etapa
El anteriormente citado Giant Steps fue precisamente el estreno de Coltrane en Atlantic, a pesar de no provenir de su primera sesión de grabación para este sello. El tema que da título al álbum es el cenit de las investigaciones que Coltrane inició unos años antes en la compañía del pianista Thelonious Monk. Además del aspecto compositivo y armónico, la velocidad a la que Coltrane fue capaz de ejecutar “Giant Steps” (con parte de sus acompañantes siguiendo a duras penas sus progresiones o perdiéndose directamente, tal y como se aprecia en las tomas alternativas del tema, puesto que se mueve por encima de los 250 bpm) sigue siendo impresionante desde un punto de vista técnico e incluso puramente físico. En este disco se incluyen otras composiciones que quedarán como imprescindibles en su legado: “Countdown” (otra buena muestra de sus investigaciones en composición), “Mr. P.C.” (dedicado al contrabajista Paul Chambers) y las ya citadas “Naima” y “Syeeda’s Song Flute”. Este será el primero de los 10 discos editados originalmente en Atlantic, que grabados en poco más de dos años se encuentran recopilados (junto a una buena cantidad de material adicional) en la caja de 7 compactos The Heavyweight Champion (Atlantic/Rhino).
No obstante, su gran éxito comercial llega en marzo de 1961 con “My Favourite Things”, el tema que daba título a su tercer disco en este sello. Tal fue su impacto que esta composición lo acompañaría durante todo el resto de su carrera (mostrando su evolución estilística) e hizo que del LP homónimo se vendieran en su primer año más de 50.000 copias, una cifra al alcance de muy pocos artistas del mundo del jazz. Coltrane desarrolló modalmente un sencillo vals del musical The Sound Of Music. En 1965 esta obra se transformaría en la famosa y almibarada película Sonrisas y lágrimas (nominada en diez categorías y ganadora de cinco Oscars de Hollywood), que relataba las peripecias de la familia Trapp en la Austria nazi de la Segunda Guerra Mundial con una cantarina Julie Andrews en el papel de novicia rebelde. Otro aspecto a destacar en este tema es la recuperación para el jazz del saxo soprano, utilizado hasta el momento de un modo casi anecdótico, si se exceptúan los casos de Sidney Bechet y de Steve Lacy. Coltrane comenzó a experimentar con este instrumento en 1959 en Chicago, aunque fue gracias a esta grabación como regresó al primer plano del jazz. Otro factor que destaca la importancia de esta grabación es que vamos a encontrar a su lado a dos de los tres acompañantes con los que conformará su cuarteto clásico. Estos músicos eran el pianista McCoy Tyner y el batería Elvin Jones. El puesto de contrabajista estará ocupado por Steve Davis, a quien sustituirán Art Davis y posteriormente Reggie Workman. Finalmente Jimmy Garrison será quien complete esta mítica formación a finales del año 1961
Si anteriormente se señalaba que el interés de Coltrane en el estudio de la música es un elemento presente a lo largo de toda su vida, sus grabaciones en Atlantic son una buena demostración práctica de ello. Por una parte va a mostrar su interés por músicas ajenas a la tradición americana y europea. Así en Olé Coltrane encontramos temas de inspiración africana (“Dahomey Dance”), asiática (“Aisha”) o flamenca (con el tema “Olé” basado en “El Vito”). Tampoco va a ser ajeno a la irrupción del free jazz. Aunque no llegó a coincidir en el estudio con Ornette Coleman, que es quien acuñó este término por medio del disco homónimo, en 1960 graba con los integrantes de su cuarteto el disco John Coltrane & Don Cherry - The Avant-Garde. Este LP contenía tres versiones de temas de Coleman, una de Don Cherry y otra más de Thelonious Monk. No obstante, decisiones de la discográfica, este disco no sería publicado hasta 1966.
Eric Dolphy y los primeros pasos en Impulse!
En 1961 Coltrane firma un contrato con Impulse!, un sello incipiente subsidiario de ABC-Paramount con el que estará asociado hasta su fallecimiento. Este contrato incluía un adelanto de 10.000 dólares para el primer año, que se convertirían en 20.000 en el segundo y el tercero. En ese momento Trane es ya un músico muy popular y la revista Down Beat lo elige como el jazzman del año en su repaso anual. Igualmente gana las votaciones de los críticos y de los lectores en las categorías de mejor saxo tenor y la de otros instrumentos con el saxo soprano. A pesar de ello vuelven a surgir problemas con una parte de la crítica. Sus detractores le echan en cara la incorporación en su grupo del flautista, saxofonista y clarinetista bajo Eric Dolphy, un músico con el que colabora durante casi todo 1961. En su visita a Europa a finales de ese año una mayoría de críticos ingleses arremeten duramente contra él. Por otra parte en la edición de noviembre de ese año de la revista Down Beat hay una dura reseña del crítico John Tynan, que habla de “un sinsentido musical que se vende actualmente en nombre del jazz… una aterradora demostración de lo que parece ser una tendencia anti-jazz en auge”. Dolphy y Coltrane contestarán públicamente a estas críticas en esa misma revista en abril de 1962. Otro músico que estará en la órbita de Coltrane para expandir su grupo hasta la formación de sexteto es el guitarrista Wes Montgomery con quien actuará esporádicamente en 1961 y 1962.
Si bien con Montgomery no ha quedado ninguna muestra de su trabajo en directo, por fortuna no sucedió lo mismo con Dolphy. De noviembre de 1961 son las grabaciones en el Village Vanguard de Nueva York que se encuentran recopiladas en el cuádruple CD The Complete Village Vanguard (Impulse!). Además de temas con su cuarteto clásico y con Dolphy, aparecen instrumentos tan poco usuales en el jazz como el oud (instrumento de origen árabe cuya versión hispana es el laúd), el oboe o el contrafagot. También recoge temas de inspiración exótica. El más famoso de ellos (del que se recogen cuatro versiones con tres formaciones diferentes) se titula “India”: estaba basado en cantos védicos y sirvió como base para que The Byrds compusieran su gran éxito “Eight Miles High”. Muestra de sus investigaciones musicales, “Spiritual” está basado en la melodía de “Nobody Knows The Trouble I've Seen” del Book Of American Negro Spirituals de Weldon Johnson.
Dolphy también fue el encargado de realizar los arreglos de Olé Coltrane (Atlantic) y Africa/Brass Sessions, su estreno en Impulse!. Esta grabación resulta ciertamente inusual como estreno en un nuevo sello discográfico. A su formación (un quinteto en el que incluía a Dolphy) añadió a una decena de músicos que empleó para sonar como un enorme instrumento. En el repertorio recogía temas tradicionales como “Greensleeves” junto con otros propios con clara referencia a los orígenes de los afroamericanos con títulos como “Africa”, “The Underground Railroad” (el nombre de la ruta que utilizaban los esclavos para huir de las plantaciones del Sur a los Estados abolicionistas) o “The Damned Don’t Cry” ("los malditos no lloran").
El cuarteto clásico
Finalmente ni Dolphy ni Montgomery permanecen en el grupo y su cuarteto clásico no variará en su formación entre abril de 1962 y finales del año 1965, salvo alguna ausencia del batería Elvin Jones.
Las siguientes grabaciones en Impulse! no van a resultar tan radicales como su estreno. Salvo su magnífica versión de 14 minutos del tema de Harold Arlen “Out Of This World” en Coltrane en el primer disco con su cuarteto clásico (que para algunos es el último gran disco de Coltrane), el resto de grabaciones de los años 1962 y 1963 van a resultar muy accesibles. En ello influyó el productor Bob Thiele . Por una parte, estaba a la búsqueda de lograr un éxito similar al que había logrado Columbia con Kind Of Blue de Miles Davis. Por otro lado, estaba el intentar contentar a una parte de la crítica que no veía con muy buenos ojos los derroteros que estaba tomando la carrera de Coltrane especialmente tras sus aventuras con Eric Dolphy. A pesar de este trasfondo, el resultado son tres joyas en la carrera del saxofonista. El primero de ellos, titulado Ballads, sirvió para mostrar que Coltrane era un músico que iba mucho más allá que el saxo tenor enfurecido que era para una gran parte de la prensa musical. En esta grabación fue capaz de obtener nuevos matices de viejos standards y canciones pertenecientes a un repertorio de estrellas populares como Frank Sinatra. Se comenta que el propio Sinatra tras escuchar la versión de “Nancy (With The Laughing Face)” mostró su interés en contratar a Coltrane para que tocase en directo con él. El segundo de los discos, John Coltrane And Johnny Hartman, supone la única vez en que John Coltrane grabó un disco como titular con un vocalista. Hartman era un cantante norteamericano más bien desconocido, residente en el Reino Unido. Su participación en este disco trabajando sobre otro puñado de standards (salvo “Lush Life” ninguno de los temas era habitual en el repertorio del cuarteto de Trane) sirvió para relanzar su carrera y alcanzar un alto grado de popularidad. El tercero de los discos es su encuentro con el gran Duke Ellington. En esta grabación rezuma el respeto que se tenían ambos músicos. Coltrane lo demostrará con su maravillosa versión de “In A Sentimental Mood”, un clásico entre los clásicos del repertorio del duque. Ellington estrenará en esa sesión “Take The Coltrane” (en referencia a su tema “Take The A-Train”) donde muestra su predisposición a sumergirse en el universo coltraneano.
A pesar de estas grabaciones en estudio su música en directo es diferente. Coltrane continúa explotando el aspecto modal de su música, que le permitía trabajar con unos largos desarrollos mientras sus compañeros le apoyaban con unas estructuras abiertas. No es extraño en esa época encontrarse con versiones de temas en directo que superan los 30 minutos. En Live at the Showboat. Philadelphia, June 17, 1963 (Rare Live Recordings) su versión de “Out Of This World” dura 25 minutos mientras que “Impressions”, 35. Tampoco será extraño encontrarse con grabaciones de temas incompletas, ya que su duración en directo suponían todo un reto para los medios técnicos de la época. En The Complete 1963 Copenhagen Concert (Gambit Records) “Impressions” "solo" dura 20 minutos debido a que la cinta se terminó. En esa misma grabación “My Favorite Things” se extiende hasta los 18 minutos. Un directo a tener en cuenta con su cuarteto clásico son las emisiones radiofónicas editadas oficialmente en 2005 con el título One Down, One Up. Live At The Half Note (Impulse!). Grabadas en 1965, de los cuatro temas editados en un compacto doble, dada su duración, destacan su aproximación a “My Favourite Things” (un tema que a pesar de su simplicidad en las manos de Coltrane va a ser una fuente inagotable de ideas a desarrollar por el saxofonista, alargado aquí hasta los 23 minutos) y especialmente “One Down, One Up”: sus 28 minutos de duración sirven para que el cuarteto se reduzca hasta quedar en un duelo antológico entre Coltrane y el batería Elvin Jones.
La cumbre del cuarteto llega en diciembre de 1964 con la grabación de A Love Supreme (Impulse!). Esta obra está estructurada como una suite en cuatro partes. Coltrane en esos momentos no seguía ninguna religión organizada, lo que no impedía que sus creencias religiosas fuesen una mezcla de elementos tomados del cristianismo, del budismo, del hinduismo y la cosmología. Esta obra es una alabanza a un ser superior no encarnado en ninguna de las manifestaciones a partir de las que derivan las distintas religiones. Tal y como se ha señalado anteriormente, en las notas de esta grabación Coltrane hace referencia a la fuerza que le ayudó a superar sus problemas personales en 1957. El disco se concibió como una obra de estudio y en su momento se publicó interpretada en cuarteto. Posteriormente se ha editado en una versión especial en formato de doble CD. Al compacto original (debidamente remasterizado) se incorporó un segundo compacto con la única interpretación conocida en directo de esta suite, en Antibes (Francia) en verano de 1965 (que es, dicho sea de paso, uno de los piratas más famosos de la historia del jazz) y unas tomas alternativas de algunos de los temas en los que al cuarteto se incorporaban el saxofonista Archie Shepp y el contrabajista Art Davis en lo que era realmente el material inédito de esta edición. Musicalmente su impacto ha sido y es muy importante, tanto en el jazz como en el rock. No es extraño que esta obra sea la única representante del jazz en discotecas de rock, ocupando un lugar destacado. Tampoco es infrecuente su aparición en las listas que pretenden resumir la historia de la música en unas pocas decenas de discos. Una buena muestra de su importancia es el más de un millón de copias vendidas (según estimaciones de su compañía) de esta obra desde su publicación original. Músicos como Santana, John McLaughlin o Branford Marsalis han interpretado y dedicado grabaciones a esta obra.
En la senda del avant-garde
A Love Supreme iniciará la senda que el saxofonista hasta el final de su carrera. En la búsqueda de un sonido total, aparecen en su música un lirismo, una libertad y una intensidad que hacen de ella algo similar a un intangible. Esta búsqueda no va a ser una tarea exclusiva de Coltrane sino que se va a contagiar sus acompañantes. De este modo se van a ir incorporando nuevos músicos que buscando una realización musical individual paradójicamente van a converger en un sonido fuertemente grupal. Este motivo llevará a que los integrantes de su cuarteto clásico abandonen sucesivamente la compañía de Coltrane: a finales de 1966 lo harán el pianista McCoy Tyner y el batería Elvin Jones. El último en hacerlo será el contrabajista Jim Garrison.
Antes, en 1965, tiene lugar la grabación de Ascension (Impulse!). Esta obra supone de alguna manera una continuación de A Love Supreme y es una incursión en el free-jazz con un grupo estructurado al modo de la formación (doble cuarteto) que grabó la obra homónima de Ornette Coleman cinco años atrás. Según los críticos de la época esta obra es “uno de los sonidos más fuertes grabado jamás”. Entre los participantes se encuentras algunas voces del nuevo jazz: Freddie Hubbard, Dewey Johnson, Marion Brown, John Tchicai, Pharoah Sanders o Archie Shepp. Estos dos últimos jóvenes (en esa época) tendrán la oportunidad de grabar sus primeras obras en Impulse! dado el interés que van a despertar entre una parte de los aficionados al jazz este tipo de propuestas estéticas. Este tema está grabado en forma de dos versiones de aproximadamente 40 minutos. Para su primera edición en vinilo se eligió una de ellas para ser editada pero una equivocación hizo que realmente se publicase como oficial la que podríamos calificar como alternativa. En las siguientes prensadas de discos se corrigió la confusión y se editó la obra seleccionada inicialmente. Esto provocó entre los aficionados de la época algo que podríamos calificar como “la búsqueda de la versión perdida”. Según se ha llegado a relatar, esto incluía visitas a las tiendas de discos en las que las cuchillas de afeitar se utilizaban para abrir el embalaje de los discos como paso previo a la comprobación del tema publicado en el vinilo. Afortunadamente la edición en compacto ha permitido que los aficionados podamos disfrutar con las dos versiones.
La pianista y arpista Alice McLeod (su esposa en esa época), el batería Rashied Ali y el saxofonista Pharoah Sanders serán a partir de ese momento sus acompañantes habituales. Su propuesta artística se encuentra encuadrada dentro del free jazz, movimiento que entiende la música como un medio colectivo de expresión y que está relacionado con la convulsa situación política y social de la época. No obstante y a pesar de este planteamiento, por encima de la expresión colectiva del grupo seguirá destacando notablemente la voz de su líder.
Algunos discos de esta época son un buen punto de acercamiento inicial al universo coltraneano, especialmente para quienes se quieran aproximar desde otros universos musicales como el de la música rock. El citado A Love Supreme (Impulse!) en su versión sencilla resulta (como se ha indicado) imprescindible en cualquier discoteca que pretenda incluir algunos de los momentos claves en la música del siglo XX. Ascension es otra buena adquisición ya que su música, más allá de las etiquetas, desprende una energía y una libertad poco habituales. También son recomendables algunos de sus directos: Live In Seattle (editado en Impulse! y grabado en las mismas fechas que Ascension) se abre con “Cosmos”, un tema de diez minutos con un planteamiento totalmente libre que sigue impresionando con la potencia que es capaz de desprender. Allí también se incluye una versión (incompleta, ya que se terminaron las cintas) de 35 minutos del tema “Afro-Blue” de Mongo Santamaría, aparentemente sencillo en cuanto a su composición, al que los músicos se aproximan de unas formas nada triviales, destacando los solos de Pharoah Sanders y especialmente el de McCoy Tyner. Live At The Village Vanguard Again! (Impulse!) es también muy recomendable, con versiones de “Naima” y, cómo no, “My Favourite Things”. Otro directo elefantiásico, muy recomendable pero no en una primera fase de aproximación al universo coltraneano, es el cuádruple compacto Live In Japan (Impulse!). En total incluye únicamente seis temas y su versión de “My Favourite Things” (58 minutos) indica perfectamente cuáles eran los parámetros creativos de Trane en esos momentos. Otro disco imprescindible de esa época, aunque grabado en estudio, es su dueto con el batería Rashied Ali titulado Interstellar Space (Impulse!). Auténtico tour de force, resulta interesante por dos motivos. En primer lugar, se puede comparar el estilo de este batería con el que mostraba Elvin Jones apenas dos años antes en One Down, One Up (Impulse!) para comprobar la evolución del saxofonista. En segundo lugar, esta grabación abría muchos interrogantes acerca de la dirección que estaba tomando la carrera de John Coltrane.
Lamentablemente no tiene mucho más tiempo para poder seguir explorando nuevos territorios. El 17 de julio de 1967 John Coltrane fallece debido a un cáncer de hígado en Nueva York, dos meses antes de cumplir 41 años. Su funeral tuvo lugar el 21 de julio y allí se leyó el poema incluido en A Love Supreme. También participaron los cuartetos de Ornette Coleman y Albert Ayler. Este último interpretó los temas “Love Cry / Truth Is Marchin In / Our Prayer” (que están disponibles en la caja de 9 compactos titulada Holy Ghost, editada a nombre de Albert Ayler y publicada por Revenant).
El resto ya es historia… y presente, ya que la figura de Trane sigue siendo una influencia fundamental en el jazz de hoy en día. Ésta se puede rastrear sin problema en una gran cantidad de músicos actuales, pertenecientes a tendencias de lo más diverso.-
En cuanto a los aficionados, la práctica totalidad de su música es accesible sin ningún problema. A fecha de hoy se encuentran disponibles desde sus grabaciones en la marina en Hawaii hasta el último de sus conciertos. Aunque es un músico presente en la discoteca de prácticamente cualquier aficionado, los sellos en los que grabó pertenecen en la actualidad a multinacionales que se encargan de mantener su catálogo presente en un mercado al que periódicamente se encargan de abastecer de material, dado el interés que presenta. A esta labor se unen otras discográficas que también se están dedicando a publicar parte de esos discos oficiales y otros piratas. Todo esto hace que no sea extraño encontrarse periódicamente con grabaciones totalmente inéditas, bootlegs reconvertidos en ediciones más o menos oficiales, reediciones con y sin inéditos, remasterizaciones, cajas y grabaciones completas de un determinado periodo / discográfica / formación en ediciones de todo tipo, condición y calidad sonora. Es tal la cantidad de “nuevo” material disponible en ciertos momentos, que causa cierta saturación.
En definitiva, la música de Coltrane es una música poliédrica, que a pesar de los años que han pasado desde su creación sigue manteniendo un interés plenamente actual. Éste va bastante más allá del que pudiera tener para los historiadores del género una figura fundamental en el desarrollo del jazz. Es una música que se puede apreciar y disfrutar desde muy diversos ángulos, enfoques y trayectorias, vengan o no desde el jazz.
Sin perder el punto de vista musical y más allá de todas estas consideraciones, las cuatro notas que inician esta obra y que son un motivo que se repite a lo largo de toda ella, son unas de las más conocidas e identificables del jazz moderno. En esta obra será la primera vez que se escuche la voz de Coltrane recitando. En su desarrollo recoge momentos de una magia especial, como cuando en el cuarto movimiento la música recita sin palabras el poema de Coltrane dedicado al Amor Supremo que se incluye en el disco
http://www.adamar.org/ivepoca/node/520
In Memoriam -Hoy se cumplen 43 años de la partida de Trane.