domingo, 30 de mayo de 2010

Thelonious Monk / Nellie´s Recordings


Thelonious Monk / The Transformer (Explore, 2007)
Thelonious Monk (Piano)

7 de Febrero , 2010

Se habla del hambre insaciable de negocio de las discográficas, que editan materiales que el artista no hubiera autorizado publicar en vida porque no superaban el test de calidad del propio autor. En este disco se va un poco más allá. Ni siquiera son cosas que estuvieran ejecutadas para que las escuchara nadie, a excepción de él mismo y de su mujer. Y esta indiscreción nos permite asistir a unos momentos del proceso creativo de un mostruo como Monk. Una maravilla. Pero para el que sea su primer disco de Monk no estoy seguro de cual será su reacción, seguramente le provocará la sensación de que ha sido legalmente estafado.

Las cintas de las grabaciones originales han sido publicadas por el sello Explore, masterizadas por Rudy Van Gelder, gracias a que su hijo, T.S. Monk Jr., descubriera estas cintas grabadas por su madre (seguro que hay para hacer unos cuantos discos más, no doy ideas), en la intimidad de dos personas que se amaban. Se trata de sesiones al piano en casa dedicadas a hacer suyo el Im Getting Sentimental Over You. Empieza pasando la tonalidad a su gusto, probando y desarrollando figuras, insistiendo en alguna escala para definirla mejor, y poco a poco va moldeando su propio "I'm Getting...". Los primeros minutos de Monk tanteando el tema es clavadito a lo que hace Ran Blake. En una hora y cuarto toca partes del tema una y otra vez, y ensaya con diferentes inventos armónicos y rítmicos, va calentándose y encontrándose a gusto, empieza a tocar de corrido, y uno percibe ese fantástico Monk en estado puro (cuantas veces esta frase, y es que todo Monk es Monk en estado puro, incluso cuando no toca). Estira y encoge el tiempo, pone y quita stride, tensa la melodía y la relaja, prueba y acierta...

Cuando finaliza el ensayo, un servidor ya se conoce suficientemente el "Im Getting ...", ha sido más de una hora. Entonces quedan los tres últimos temas en directo, que son media horita más. Y es un subidón oír como aquel tema que ha estado explorando en su casa, eclosiona con energía en un escenario en público, tocado por Monk en cuarteto (piano, saxo, batería, bajo) que no sé cuales son las formaciones de las tres diferentes sesiones porque no viene en los créditos, ni el año de su grabación. Las cintas caseras de los dos cds (excepto estas tres últimas performances en cuarteto) fueron grabado con el magnetofón casero del matrimonio Monk en 1953.

Si alguien tiene la tentación de escucharlo alguna vez, va de escuchar los 107 minutos del tirón, es como una buena película, con un buen principio y un explosivo final. No va de oír un trocito. Un documento excepcional, en la onda de los 22 minutos incluidos en el Thelonious Himself ©1957, en la edición cd, donde Monk le da vueltas al 'Round Midnight, que es otro material de este tipo, pero grabado en estudio, mientras calienta antes de una grabación.

Un disfrute para fanáticos de Monk y para los curiosos de fisgar en el trabajo de un pianista genial de jazz cuando no está en el escenario.

http://www.jazzitis.com/web/content/transformer

Thelonious Monk - Crepuscule With Nellie

Lafayette Gilchrist / Arrebatadores Vórtices Sonoros


Lafayette Gilchrist: La Danza del Elefante
Jueves 27 se Mayo, 2010

Por Ricardo Arribas

Quizá el sonido particularísimo de este pianista era inevitable: no se trata del clásico músico que supo desde muy joven que se dedicaría a esto (para el la música es un fruto tardío, y no empezó a tocar el piano hasta los 18 años), ni es el clásico jazzman que escucha también otros estilos: Gilchrist creció, como tantos otros jóvenes en Washington D.C., impregnado de los sonidos que transitaban las calles de su barrio, y descubrió el jazz mucho después. Prince, rhythm&blues, soul, funk, rap, hip hop, go-go… vivía cerca del llamado padrino del go-go, Chuck Brown, y escuchaba embelesado, desde la acera, los sonidos que salían del local donde aquel ensayaba. Así que no es de extrañar que de su música rebose un sentido rítmico tan rudo y rotundo.

Pero, por el motivo que sea, toda esa densa amalgama estilística se transforma, al ser procesada por la mente, el corazón y los dedos de Gilchrist, en jazz. Jazz rabiosamente personal, esculpido sobre el rocoso cimiento de esos ritmos funk, soul y go-go, infectado de demoledores riffs y electrizado por los arrebatadores vórtices sonoros creados por su piano insólito.

“Para hacer mi propia música he tenido que dejar atrás la música con la que crecí, la música que amo: el hip-hop y el go-go. Porque quiero llegar más dentro de esa música de lo que se escucha en la radio. Cuando dialogo con estas músicas tiene que haber espacio para meterse en ellas más allá de lo que nadie ha llegado. El resultado no es tanto el sonido del jazz como su espíritu”.

La música de Lafayette Gilchrist es preciso experimentarla: no es susceptible de ser asimilada a una sucesión de influencias más o menos evidentes, su visceral sentido musical proviene de una evolución puramente autodidacta difícilmente rastreable en la historia del jazz… si acaso, por su torcido y personalísimo sentido rítmico y, sobre todo, por su irreductible e insólita aproximación “filosófica” al jazz, viene a la mente la figura de Monk: más que ningún otro músico que yo haya escuchado, Gilchrist provoca esa sensación tan monkiana de colisión frontal entre su música y las expectativas del oyente, vulneradas una y otra vez por un corpus musical perfectamente macizo que, en muchos casos, las doblega y rehace casi a la fuerza… así descrito quizá no dan ganas de escucharlo pero creedme, la causa no es la música sino la descripción. Porque el caso es que tanto Monk como Gilchrist lo que hacen es darnos a conocer enfoques musicales inesperados, absolutamente novedosos, teóricamente inviables pero… ¡voila! finalmente fascinantes.

Ya digo, Gilchrist empezó a tocar el piano mayorcito. Vale la pena escuchar su relato de la ocasión en que tocó el piano por primera vez, a los 18 años, mientras vagaba por los salones desiertos del UMBC's Fine Arts Building después de una clase de literatura: “Un piano Steinway estaba situado en el escenario, abierto, solitario. Todo el teatro estaba a oscuras excepto una luz que caía sobre el piano. Me senté, puse los pies sobre los pedales y traté de tocar… aquello sonaba bastante bien”.

Pronto conoció a un joven trompetista, Freddie Dunn, que le ayudó a comprender algunos de los arcanos más elementales de la música. Ninguno de los dos sabía muy bien, por entonces, qué era el jazz. Pero ya tenían lo más importante: curiosidad por esa música dominada por la improvisación. "Wynton[Marsalis] era el único tipo del que habíamos oído que tocaba jazz. Era tan serio… Hablaba de Thelonious Monk como si Monk fuese amigo suyo. Así que pillamos un cassette con éxitos de Monk, la pusimos un montón de veces y decidimos que nos gustaba”.

Lafayette Gilchrist & The New Volcanoes- Live at Bertha's Mussels, Baltimore


Gilchrist pretendía investigar los límites entre el hip-hop y el jazz, así que pronto (1993) el duo se transformó en cuarteto, con la llegada de dos músicos que se encontraban cómodos en ambos estilos: el bajista Vince Loving y el bateria Dennis Chambers. Habían nacido los New Volcanoes. El grupo se transformó en sexteto con la adición de Mike Cerri a la trompeta y James DePhilipo al eufonio, y grabó The Art Is Life. El saxofonista John Dieker sustituyó a Dephilipo para la grabación del segundo disco, Asphalt Revolt. No he tenido ocasión de escuchar ninguno de los dos.

En 1999 Gilchrist conoció a Vernon Reid, guitarrista del grupo de rock Living Colour, que eventualmente le presentaría a la gente de Hyena Records (“no quiero grabar un disco de bebop de los jóvenes leones”, dijo Gilchrist a su productor Joel Dorn). Poco después entró en contacto con el saxofonista David Murray, que terminó invitándole a formar parte de su cuarteto. Dos encuentros afortunados, que se saldaron con palabras de aliento de ambos hacia el talentoso pero completamente desconocido músico.

Respecto a la circunstancia negativa de ser haber sido “descubierto” para el gran publico tras largos años de esfuerzo, comenta Gilchrist: "Ha sido una suerte estar lejos del foco de atención y no sentirme presionado para hacer lo que todo el mundo estaba haciendo. Es como la libertad de que disfrutó Prince cuando desarrolló ese nuevo sonido en Minneapolis. Esa libertad le dio coraje para probar cosas nuevas, coraje para ser vulnerable, coraje para sacar toda esa música extraña ahí fuera y soportar las críticas, como Ornette Coleman o Cecil Taylor”.

En 2001 Gilchrist había formado un octeto formidable, que grabó el último disco pre-Hyena (Collage Dreams), otra pieza difícil de encontrar. Por suerte este grupo no es flor de un solo día, había costado demasiado esfuerzo reunirlo como para permitir su rápida desbandada. Así, hemos tenido finalmente ocasión de escucharlo en tres de las cuatro grabaciones para Hyena Records.

A continuación se incluyen enlaces a comentarios específicos de cada uno de sus discos en este sello (donde ha desarrollado todos sus discos desde 2004), así como de las dos (magníficas) grabaciones de David Murray en las que ha intervenido Gilchrist, Waltz Again (Justin Time, 2005) y Sacred Ground (Justin Time, 2007).
(Todas las declaraciones de Lafayette Gilchrist han sido extraídas del artículo de Geoffrey Himes publicado en el Baltimore Citipaper el 25 de Julio de 2007)

http://www.jazzitis.com/web/content/lafayette-gilchrist-la-danza-del-elefante
Lafayette Gilchrist & The New Volcanoes - Super Jam

viernes, 28 de mayo de 2010

Scandinavian Jazz / The Amazing Landscape of Jazz

El Jazz que viene del frío

Por Eduardo Hojman

El adjetivo «nórdico» evoca invariablemente paisajes yermos, blancuras infinitas, noches eternas, vientos helados y austeridad calvinista. En el jazz, esa imagen se corresponde con los sonidos atmosféricos de músicos como Jan Garbarek, Terje Rypdal o Bobo Stenson, entre otros representantes de un escudo báltico cuyo estilo tan característico tiene más que ver, en realidad, con un visionario alemán, Manfred Eicher, creador del afamado sello ECM. Eicher introdujo en el mundo del jazz un concepto sonoro caracterizado por una música álgida, paisajística, llena de espacios vacíos y prácticamente despojada de swing, que en el imaginario de los oyentes no tardó en asimilarse al jazz europeo o jazz nórdico, aunque en un principio ECM generó ese panorama sonoro con músicos norteamericanos.

Mal Waldron, Don Cherry, Bill Frisell, Pat Metheny y Keith Jarrett fueron esos primeros artistas de ECM, cuyo sonido parecía influido por el supuesto entorno estepario donde grabaron sus discos. En la década de 1970, Jarrett mantuvo una agrupación conocida como su «cuarteto europeo», con la que grabó el disco My Song, cuyas melodías evocadoras, introspectivas y relajadas marcaron la forma en que se suponía que debía sonar el jazz nórdico.

Sonido atmosférico. Los otros miembros del cuarteto, el percusionista noruego John Christensen, el contrabajista sueco Palle Danielsson y en especial el saxofonista noruego Jan Garbarek alimentaron el temprano interés de ECM por grabar también a músicos escandinavos, que mantuvieron ese mismo sonido atmosférico, por algunos llamado neo cool. Hoy en día, cualquier aproximación superficial al jazz del Norte de Europa sigue considerándolo sinónimo de ese neo cool o de ECM.

Pero el jazz existía en esos fríos países europeos antes de la aparición providencial de Eicher, aunque sin marcas identificatorias claras. Uno de aquellos pioneros fue el saxofonista sueco Lars Gullin, con una carrera iniciada a fines de la década del cuarenta y más tarde influida por los sonidos cool de Gerry Mulligan y por la cerebral introspección de Lennie Tristano. Gullin fue uno de los escasísimos músicos europeos que dejaron una marca en el jazz norteamericano, que celebraba tanto su impresionante rango sonoro como las influencias escandinavas que cada tanto dejaba traslucir en su música. Años antes, el danés Svend Asmussen (conocido como «el violinista vikingo») también obtuvo repercusión a partir de la calidad técnica con que demostraba su fuerte influencia de Stuff Smith y otros violinistas del swing.

De todas maneras, el danés más famoso dentro del jazz fue durante mucho tiempo el impresionante contrabajista Niels-Henning Ørsted Pedersen. Más conocido como NHØP, Pedersen se convirtió en el acompañante favorito de muchos músicos norteamericanos que vivían o pasaban por Dinamarca. Practicaba un jazz con un alto sentido del ritmo y fuertes raíces en el hard bop y con un sonido exento de colores locales daneses.

«Generalizando mucho -dijo una vez el pianista sueco Esbjörn Svensson- el jazz de Dinamarca es bastante tradicional, suena muy parecido al norteamericano. El de Noruega, en cambio, es novedoso: experimentan mucho con máquinas, sonidos, colores, y crean un estilo completamente propio. En Suecia, estamos algo así como en el medio». Si el sonido escandinavo de ECM influyó en el jazz norteamericano con su atmósfera gélida y austera, Dinamarca se convirtió por lo contrario en un «hogar fuera del hogar» tanto para la tradición más rancia como para los músicos mismos. Stan Getz, Oscar Pettiford, Dexter Gordon, Kenny Drew y Ben Webster, entre otros, residieron allí un tiempo y crearon, con su poderosa presencia, un jazz danés muy estadounidense. Miles Davis, sin llegar a vivir allí, tuvo en su banda a dos grandes músicos daneses: la percusionista Marilyn Mazur (danesa de adopción) y el trompetista y compositor Palle Mikkelborg, responsable de la penetrante atmósfera noreuropea del disco Aura, de Davis.

Bugge Wesseltoft - Yellow is the Colour


La regla de tres. La regla de tres de Svensson es acertada, especialmente al ubicar el jazz más avanzado en Noruega. Antes, sin embargo, del explosivo surgimiento del mismo Svensson, la tradición jazzística sueca se basaba mayormente en la legendaria historia de Gullin y en la interesante carrera de Bobo Stenson, versátil pianista con un sonido melódico y romántico que acompañó a Sonny Rollins, Charles Lloyd y Don Cherry, y que generó algunos sonidos más propios en compañía de su compatriota Palle Danielsson, de los noruegos Garbarek y Arild Andersen, o del polaco Tomasz Stanko.

El EST trío, liderado por el pianista Esbjörn Svensson, no sólo puso a Suecia de golpe en el mapa del jazz, sino que se convirtió en la banda de jazz más exitosa de Europa. Con un sonido que bebía tanto de la fase más lírica (y clásica) de Keith Jarrett y de las audacias armónicas de Thelonious Monk como del rock progresivo de los setenta y hasta de Jimi Hendrix, el EST trío lanzó unos catorce títulos antes de que un absurdo accidente de submarinismo acabara en 2008 con la vida de su líder. Para algunos cultivador de un jazz simple y modernizado para consumo masivo, Esbjörn Svensson fue una maravillosa estrella fugaz que encarnó, por un breve lapso de tiempo, la versión más amable y popular del jazz europeo.

A la labor pionera de Garbarek, que ayudó a definir el jazz nórdico en general (aunque luego se inclinó peligrosamente hacia la new age), y de Terje Rypdal, un atmosférico guitarrista capaz de evocar las heladas extensiones bálticas con Odyssey, After the rain y Waves, se sumó a finales del siglo XX el inclasificable pianista, compositor y productor Bugge Wesseltoft, uno de los máximos representantes europeos de lo que se ha dado en llamar future jazz o nu jazz.

El futuro es noruego. Wesseltoft sentó las bases de un sonido basado en ritmos de la música house, improvisaciones melódicas y armónicas herederas tanto del jazz lírico de Bill Evans como de la fusión y el ambient, y una saludable falta de respeto por las divisiones entre la música popular y la culta. Si para algunos es un músico técnicamente limitado y sobrevalorado, demasiado inclinado a coquetear con sonidos comerciales de atuendo elegante e informal, lo cierto es que muchos de sus discos ofrecen sonidos tan ricos como accesibles. Otros de los representantes de la música más avanzada de Noruega son Christian Wallumrød, con su avanzada fusión entre la música contemporánea y el jazz, y el trompetista Nils Petter Molvær.

La escena noruega es lo bastante pequeña y abierta como para alentar todo tipo de cruces estilísticos y de personal entre sus músicos. Esta actitud, transferida al jazz báltico en general, ha tenido como resultado el meteórico crecimiento de la que bien puede ser la mejor banda de jazz noreuropeo, Atomic, un quinteto formado por suecos y noruegos que fueron considerados el supergrupo del free jazz europeo. Si en los Estados Unidos esta música empieza a dar muestra de cierto anquilosamiento y en el resto de Europa aún es difícil encontrar sonidos realmente particulares, el jazz que viene del frío bien puede ser uno de los más interesantes futuros posibles.

Esbjörn Svensson Trio- A Picture Of Doris Travelling With Boris

jueves, 27 de mayo de 2010

Raynald Colom / L'equilibri Alquimista


El joven trompetista Raynald Colom cierra hoy el Ciclo de Jazz Logroñes

El potente quinteto del músico franco-catalán incluye al saxo tenor Javier Vercher y al pianista Albert Bover

27.05.10 - 00:30 - J. A. G. LOGROÑO.

El joven trompetista franco-catalán Raynald Colom cerrará a las 20.30 horas de hoy, con su concierto en el Teatro Bretón, la décima edición del Ciclo de Jazz de Logroño. Colom llega al frente de un potente quinteto en el que destaca la presencia de Javier Vercher al saxo tenor y del pianista Albert Bover. Completan el grupo el contrabajista Rashaan Carter y el batería Frank Fluker.

Nacido en Vincennes (Francia) en 1978 -aunque se trasladó diez años más tarde a Barcelona con su familia- Colom empezó su aventura musical a los cuatro años con unos estudios de violín que se prolongaron hasta los ocho años, cuando sus padres le regalaron una trompeta.

Ya instalado en Barcelona reforzó sus estudios musicales hasta el punto de haber sido alumno de Wynton Marsalis, Roy Hargrove y Kenny Barron. En 1999 obtuvo una beca para estudiar en el Berklee Music College de Boston.

En el año 2000 empezó a trabajar profesionalmente con músicos como Albert Bover, Randy Brecker, Jesse Davis, Robin Eubanks, Perico Sambeat o Antonio Serrano. De forma paralela Manu Chao le propuso hacer la gira de presentación de su CD 'Clandestino' en Estados Unidos y en América Latina.

Desde el año 2004 Raynald Colom es uno de los músicos más solicitados de la escena española, sin distinción de estilos, lo que le ha permitido tocar y participar en las grabaciones de músicos tan dispares como La Tremendita, Fermín Muguruza, Lluís Vidal, Duquende, Mulgrew Miller, Javier Colina o Chicuelo.

La asociación de Músicos de Jazz y Música Moderna le ha otorgado varios reconocimientos, entre ellos, el premio al mejor trompetista -2001, 2002, 2004 y 2005- y el galardón al disco de Jazz del año 2005.

http://www.larioja.com/v/20100527/cultura/joven-trompetista-raynald-colom-20100527.html

Raynald Colom Quartet- Festival de Jazz de Figueres (Març 2010)

miércoles, 26 de mayo de 2010

U2 / Adiós al Glastonbury Festival 2010


U2 cancela en Glastonbury y anula su gira americana

25/05/2010

U2 cancela en Glastonbury y anula su gira americana. La intervención quirúrgica de Bono, líder de la banda irlandesa U2, ha sido la causa de la cancelación de su actuación prevista para el próximo Festival de Glastonbury. Bono estaba muy ilusionado, con su participación, y había preparado una canción especial para su concierto en el famoso festival inglés.

Bono deberá estar fuera de los escenarios por un período, de no menos, de ocho semanas; lo que obligará al grupo irlandés a anular los compromisos de la gira americana. De momento, sus fechas previstas en España, San Sebastián y Sevilla, no sufren variaciones.

Tras el rotundo éxito de la gira de U2 del año pasado, que contó con Barcelona como punto de partida de la gira mundial, con dos conciertos en el Camp Nou y 180.000 espectadores, el 'U2 360º Tour' continúa en 2010. Los fans que se perdieron los conciertos del pasado verano, tendrán de nuevo la oportunidad de vivir de cerca el 'U2 360º Tour', que está confirmado en Alemania, Dinamarca, Finlandia, Grecia, Turquía, Francia, Bruselas, España...

http://www.laguiago.com/_espana/evento/30226/u2-cancela-en-glastonbury-y-anula-su-gira-americana/


U2 360º Tour - Live at Barcelona Camp Nou Stadium - (Opening Night Concert)



Miércoles, 26 de mayo de 2010

U2360º At The Rose Bowl


Argentina lo mira por tevé

La gira de presentación de No Line on the Horizon parece el non plus ultra de un concierto de rock. Tras la operación de Bono, el grupo levantó toda su agenda 2010, lo que aleja las esperanzas de verlos nuevamente en Buenos Aires.

Por Eduardo Fabregat

¿Habrá que resignarse a que, como en los viejos tiempos, haya que vivir esto a través de una pantalla y nada más? Las señales que llegan del campamento irlandés no son buenas: U2 acaba de levantar la gira 2010 y recién saldrá a la ruta de nuevo en 2011, lo que indica que la operación de espalda de Bono no fue moco e’pavo. Con lo que la esperanza de ver el U2360º Tour a fines de este año se diluye definitivamente, y si a eso se le suma que el gobierno de Buenos Aires puso infinidad de trabas a los shows en River, pocos apuestan hoy por una tercera visita del cuarteto. Es una pésima noticia, y basta sumergirse en U2360º at the Rose Bowl, el DVD que se lanzará a comienzos de junio, para certificarlo.

Desde aquel ZooTV de los ’90, U2 consigue el milagro de superarse una y otra vez. Al asumir su condición de banda de estadios, se concentró en darle a esa ceremonia el entorno apropiado y en cada gira subió el listón un poco más. En ese sentido, cuesta imaginar cuál puede ser el próximo paso: la puesta a 360 grados diseñada por Willie Williams parece el non plus ultra de un concierto de rock, un escenario circular con una pasarela a la que se accede por puentes móviles, una suerte de gazebo de la NASA, cargado de luces y pantallas, situado en el centro del campo. Eso posibilitó que, el 25 de octubre de 2009 en Los Angeles, U2 actuara para el público más numeroso de su historia, 97 mil personas que convierten al Bowl en un hervidero.

No podía ser de otra manera. Es que en este caso la cáscara tecnológica no esconde un vacío artístico, sino todo lo contrario. A la maquinaria de luz y sonido se suma la ajustadísima máquina musical que el cuarteto conforma después de tantos años. No se trata sólo de la posibilidad de armar un setlist infalible, sino también de la amplitud de matices que U2 tiene a su disposición, el sonido que echan a andar cuando salen a la carretera. El todo y las partes: la base monolítica de Larry Mullen Jr y Adam Clayton y la sapiencia de Bono para sacarle el mejor partido a su garganta, la marca de identidad que supone tener en sus filas a The Edge, presentado con justicia por el cantante como “un visitante del espacio exterior, donde ningún otro guitarrista ha ido antes”. Tocando esas canciones.

Da bronca pensar que la Argentina puede no llegar a vivir este show. Y “vivir” es un término clave. U2 apela a los mejores pasajes de No line on the horizon, How to dismantle an atomic bomb y All that you can’t leave behind, revisita Achtung Baby (“Until the end of the world” es uno de los puntos más altos) y The Joshua Tree, desempolva “The unforgettable fire” y “MLK”, no olvida la épica de “Sunday bloody Sunday”. Emociona con “I still haven’t found what I am looking for” y la preciosa versión acústica de “Stuck in a moment you can’t get out of”, rockea a alto voltaje con “Vertigo” (que cita al “It’s only rock’n’roll” Stone) y “Elevation”, arma un megadisco con “I’ll go crazy if I don’t go crazy tonight”, sorprende una y otra vez con su vitalidad a prueba de burocracias artísticas. Habrá que atesorar este DVD, disfrutarlo, dejarse llevar: quizá sea el único contacto que este país tenga con esta nueva demostración de la clase de grupo irrepetible que es U2. Decir que es una pena es quedarse corto. Muy corto.

http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/7-18083-2010-05-26.html


U2-360° Tour - At The Rose Bowl - DVD Trailer

martes, 25 de mayo de 2010

Inolvidable Homenaje al Tango Argentino / Festejos del Bicentenario de la Revolución de Mayo / Buenos Aires-Argentina

Ampliaron la presencia del tango

Casi a último momento se agregó una nueva actividad artística a los festejos del Bicentenario. El segmento tanguero, previsto para hoy, a las 19, en el escenario de 9 de Julio y Corrientes, será complementado mañana, con otro que tendrá a figuras, como Horacio Salgán, Susana Rinaldi y Leopoldo Federico.

En bambalinas se dijo que varios productores de shows se habían sentido ofendidos porque algunos de sus artistas no estaban incluidos en el festejo.

La actuación de hoy no tendrá modificaciones. Con buen criterio, se pensó en una producción evocativa, que estará dedicada a recrear el estilo orquestal de algunos de los próceres de la música local: Aníbal Troilo, Sebastián Piana, Astor Piazzolla y Eduardo Rovira. También se verá el espectáculo Cantores de Típica (Alberto Podestá, Juan Carlos Godoy, Lalo Martel y Osvaldo Ribó) y un ballet de tango.

Mañana, alrededor de las 20, comenzarán a desfilar algunas figuras como Horacio Salgán, quien a veinte días de cumplir 94 años y, aunque está retirado, cada tanto reaparece en los conciertos del Quinteto Real, que lleva adelante su hijo César, sentado al piano del conjunto.

Además de los músicos del quinteto Real, don Horacio y el guitarrista Ubaldo De Lío, en la grilla figuran Juan "Tata" Cedrón, el trío del bandoneonista Rodolfo Mederos, con el cantor Ariel Ardit, y, pasadas las 21.30, la Selección Nacional del Tango, con la cantante Susana Rinaldi, Leopoldo Federico, Ernesto Baffa, Mauricio Marcelli y Julio Pane, entre otros músicos de primera línea.


Susana Rinaldi y La Selección Nacional del Tango - Naranjo en Flor
Festejos del Bicentenario de Argentina - Homenaje al Tango Argentino

La Cumparsita - Saludo Final en el Homenaje al Tango-Festejos del Bicentenario de Argentina en Buenos Aires

lunes, 24 de mayo de 2010

Horacio Salgán / La Vuelta del Maestro


Dos siglos con Horacio Salgán

La fiesta nacional lo sacó de muchos años de negarse a tocar en vivo, aunque seguía componiendo y arreglando. Mañana vuelve a escena renovando su dúo legendario con De Lío.

Por Karina Micheletto

Su slogan de presentación podría ser “93 años y la pinta de siempre”. Es un hombre habitualmente reservado, encantador una vez que la charla se ha encendido, cargada de anécdotas alrededor de la música. Horacio Salgán conserva la pinta de las fotos de los discos que grabó hace rato: su porte distinguido, su bigote que es marca, su saco crema con mocasines al tono. Conserva, sobre todo, la capacidad de hacer del piano un vehículo para dotar al tango de una exquisita distinción, y de sus arreglos orquestales –en los que continúa trabajando para dotar de repertorio al Quinteto Real, institución que continúa su hijo César– una marca de identidad. Horacio Salgán anunció hace años su retiro de los escenarios, y no hubo nada, ni el pretexto del cumpleaños número 90, que lo hiciera cambiar de opinión. Hasta ahora. Porque Horacio Salgán será uno de los participantes del segmento tanguero programado para mañana en el marco de los festejos del Bicentenario, en un regreso que sus seguidores ya no soñaban, de lo mejor de la programación del escenario instalado en la 9 de Julio.


Sentado en su departamento de Villa Crespo, en un living dominado por el piano, charlando animadamente de Francini y Pontier, de Gardel y la ingratitud, del misterio del tango, de lo que es verdad en música, podría pasar por un simple mortal. Pregúntese a cualquier tanguero quién es Horacio Salgán: seguramente, no un simple mortal. Pero aquí está, contando que acaba de ver por televisión lo que está pasando en la 9 de Julio, que le encantó el despliegue de los desfiles, las delegaciones provinciales, las locomotoras. Allí estará él en pocas horas, protagonizando no sólo su regreso artístico con su histórico Quinteto Real, también el regreso de un dúo que marcó un hito en el tango: Salgán-De Lío. “En realidad vuelvo a lo mío, a lo de toda mi vida. Estoy en mi propia salsa, digamos. ¡En mi propio jugo!”, sonríe al imaginar lo que vendrá, en un repertorio que prefiere no develar todavía, “para no restar sorpresa al asunto”.

A su lado su hijo César, continuador del arte del piano de Salgán, y también de su lugar en el Quinteto Real, sintetiza con humor: “Mi padre se ha retirado y yo ocupé su lugar. El lunes me voy a retirar yo, y él va a ocupar mi lugar”. “Yo siempre he tocado el piano acá en casa, no dejé de tocar –aclara Salgán–. Lo que pasó fue que después de 75 años de trabajo, y de casi 94 de vida (porque me faltan unos minutos, ya están ahí) dije: me voy a tomar un descansito, me corresponde. Pero ahora nuevamente voy a estar tocando algunas cositas, y el marco será extraordinario. Me pone feliz pensarlo.”

–Los tangueros ya no esperaban volver a escucharlo en vivo, fue muy tajante al decir que se retiraba.

–Es que los motivos eran válidos, créame. No son solamente 75 años de trabajo, son 75 años de trabajo intenso. La vida mía he estado siempre marcada por el exceso de trabajo, los compromisos, los viajes, las giras, escribir los arreglos, cumplir con los plazos, que siempre eran tiranos... Llegó a ser casi un estado enfermizo para mí. Y no fueron unos años, toda la vida fue así. Por eso llegó un momento en que necesariamente me quise tomar un descanso, ya era demasiado.


–Y en este tiempo que no trabajó, ¿qué hizo?

–No toqué en el escenario, me dediqué a escribir instrumentaciones para el Quinteto Real, hice unas cuantas para un disco que van a estar grabando este año. Hice también unas cosas para orquesta sinfónica, para este querido amigo que es Daniel Barenboim, una zamba, un malambo. No me quedé quieto. Para mí hay un hecho físico evidente, y eso es trabajo, pero todo lo que signifique música no es trabajo. Yo siento la necesidad de seguir escribiendo como cuando era joven. Es decir, la semana pasada.

–¿Y qué siente hoy que es el tango, después de 75 años de trabajo?

–El tango es un misterio, una música tan rica que no se acaba nunca. Es sorprendente que una música popular tenga esa repercusión y esa jerarquía. Le puedo dar un ejemplo que sintetiza la evolución que tuvo el tango: cuando era chico yo recuerdo que la gente hablaba del tango “El entrerriano” y decía “es un tango de Rosendo”. Con el pasar de lo años me enteré de que el autor era Rosendo Mendizábal. ¿Y por qué no daba a conocer su apellido este señor? Porque era profesor de algunas niñas de familia, que si se hubieran enterado de que componía tango urgentemente lo hubieran despedido. Fíjese lo que ha transcurrido desde eso hasta hoy. Han tocado tango los más grandes músicos del mundo, Artur Rubinstein, por ejemplo. La sinfónica de Berlín hace “A fuego lento” y me lo dedica en el día de mi cumpleaños. Lalo Schiffrin me cuenta que cuando iba a la casa de Stravinski él le pedía que tocara música mía. Le cuento esto no para hacer un autoelogio, sino para explicar adónde llegó el tango, habiendo surgido como una cuestión non sancta. Otro ejemplo de lo que era el tango hace unos años: cuando el padre de Julio y Francisco De Caro, que era un italiano que tenía un conservatorio, se enteró de que sus hijos tocaban tango, los echó de la casa. ¡No sé cuánto tiempo estuvieron por ahí! No era ninguna pavada, era grave la cosa.


–Y en su caso, ¿cómo tomó su familia que usted tocara tango?

–Yo tuve la suerte de que mis padres eran muy allegados a la música. Mi papá tocaba el piano de oído, y un poquito la guitarra. En mi casa se escuchaba ópera, me llevaban a los conciertos, tuve también la suerte de escuchar en el Colón grandes cantantes y pianistas. Y también, por ejemplo, recuerdo que una vez me llevaron a escuchar a un hombre que recién llegaba a traer el folklore a Buenos Aires, Andrés Chazarreta. Actuaba en La Rural, con su conjunto, y acá en Buenos Aires casi nadie conocía la música del interior. Y fíjese qué hombre de suerte he sido, tuve otra suerte: mis padres me inscribieron en el Conservatorio Municipal, donde tuve una gran maestra no de técnica pianística sino de interpretación.


–¿Cuál sería la diferencia?

–La técnica no es más que un adiestramiento manual: ponga la mano así, haga esto, haga lo otro. Ahora, cuando eso se pone al servicio de la interpretación, de la belleza, de lo que el autor quiso decir, es otra cosa. Pero hasta que no se llegue a eso, el resto es un mero adiestramiento manual. Yo tuve la suerte de tener grandes maestros de interpretación y de armonía. Y como no tuve un maestro de técnica, busqué de muchas maneras. La mayor parte de ellas equivocadas. Yo pensaba: ¡ah, sí ahora encontré cómo se toca el piano! Y a los dos años me daba cuenta de que estaba equivocado. Y creo haber llegado a la gran técnica pianística a los ochenta años. Porque la vocación y la pasión mía por la música es tan grande, que nunca dejé de estudiar. ..


–Así que según usted lleva unos trece años de buen pianista.

–Más o menos (risas). El resto, de organista.

–¿Cómo es eso?

–Trabajé muchos años de organista de iglesia. Era organista de la iglesia de San Antonio de Devoto, después fui organista en el Gran Cine Florida. A veces a los muchachos les hago un chiste: yo era un gran organista, pero tuve que dejar de tocar porque se me murió el mono.


–¿Cuál es el tango favorito, dentro de su obra?

–No puedo decirlo, ni siquiera puedo decir que sea un tango. Tuve la suerte de poder tocar los distintos géneros, he escrito mucha música brasilera, folklore, jazz, valses peruanos, de todo. Y me ocurre una cosa curiosa, también para mi suerte: cada vez que estoy trabajando en un género determinado, estoy escribiendo y tengo la sensación de que toda mi vida no he hecho más que eso, de tan cómodo que me siento dentro de ese género. En esos días o semanas en que trabajo sobre eso, es como si nunca hubiera tocado otra cosa.

–¿Usted mismo no se define como tanguero?

–Sí, puedo decirlo así: yo no soy un tanguero. Tengo la suerte de poder ser en un momento dado un tanguero. Y claro, me he manifestado ante el público con el tango, más que con cualquier otra expresión. Le dije que para mí el tango es un género misterioso, ¿no?

http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-146227-2010-05-23.html



Los feos y los colectiveros

Horacio Salgán se define una y otra vez como un hombre afortunado. Otra de sus suertes, dice, fue haberlos descubierto a Edmundo Rivero y a Roberto Goyeneche, los dos cantores más famosos de su orquesta. “Rivero no respondía a lo que en la época se esperaba de un cantor”, describe Salgán. “Por un lado porque parecía que su voz era muy grave. Pero además lo común era buscar un cantor con una imagen... favorable. ¡Y no era el caso de Rivero! (risas). Por eso nos echaron de Radio El Mundo, porque decían que los dos éramos muy feos, y él cantaba mal y yo tocaba peor. ¡Eramos feos hasta por radio! (risas).”

–¿Cuán resistido fue en un comienzo Rivero?

–Si le digo que por no tener dónde cantar se dedicó a acompañar a otros cantores, porque él tocaba bien la guitarra, se va a dar una idea de cuán resistido fue. Yo lo escuché una mañana en radio La Voz del Aire, y me di cuenta de que allí había alguien que tenía un gran valor. Lo cité en Radio El Mundo. Cuando lo vi dije: no, evidentemente no es el galán que se espera que esté al frente de una orquesta. Pero cuando lo escuché cantar me convencí: yo por este tipo me juego. No era que yo no supiera que había que poner un galán, claro. Pero soy un enamorado de la verdad dentro de la música, de lo cierto, lo demás es secundario. ¡A mí qué me importaba si era lindo o feo, si no lo quería para casarme!

–Y a Goyeneche, ¿cómo llegó?

–Cuando Horacio Deval se retira de mi orquesta, empiezo a probar cantores para sustituirlo. Y un día aparece Goyeneche, que era colectivero. Al principio Goyeneche venía, cantaba dos o tres vueltas con la orquesta, y después salía dos o tres vueltas con el colectivo. ¡Era un cantor de muchas vueltas!

http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/146227-46940-2010-05-23.html


Horacio Salgán y su Orquesta - Tierra Querida

Teatro Colón de Buenos Aires / El Orgullo Recuperado / Festejos del Bicentenario Argentino


El Teatro Colón vuelve a brillar

Lunes 24 de mayo de 2010
Por Santiago Dapelo (Fragmento)

Es jueves, faltan cuatro días para la reapertura y aún el Teatro Colón late despacio. Con timidez. Los actores que interpretarán hoy el segundo acto de La bohème, la ópera de Puccini, marcan el ritmo de la tarde. ¡No! Grita el director de la orquesta, corrige y todo vuelve a empezar.

Pasaron más de 1100 días desde que el telón -símbolo del teatro- bajó por última vez. Atrás quedaron los días de locura, en los que no se sabía cuándo y cómo iba a quedar el teatro. Interminables horas de luces apagadas, de obra, pero hoy el Colón volverá a brillar para reafirmar que su nombre sigue estando entre los más destacados del mundo; lugar que comparte con la Scala de Milán, la Ópera de París, el Metropolitan de Nueva York, el Bolshoi de Moscú y el Teatro Nacional de Munich.

A horas de la reinauguración del Teatro Colón, una de las joyas arquitectónicas y, sobre todo, acústica, más importante del mundo, lanacion.com es uno de los pocos testigos de ese renacer en uno de los tantos ensayos de la semana. "Hoy es un punto de partida, no es que llegamos a ningún lado. Recuperar cosas que supimos tener y que no deberíamos perder nunca más", explica Pedro Pablo García Caffi, director general del Colón.


El centenario del teatro, cumplió 100 años en 2008 -estuvo cerrado por las refacciones-, fue un momento de gran tristeza para la Argentina. Por eso es tan importante para los que estuvieron en el proceso de recuperación que todo salga a la perfección: "La gente que estuvo en la obra, especialmente los equipos de restauración conservativa, hicieron un trabajo deslumbrante. Equipo de profesionales, de gente argentina que demuestra lo que somos capaces cuando hacemos seriamente nuestro trabajo", sostiene García Caffi.

Los visitantes que se acerquen a partir de hoy podrán caminar por el hall central, iluminado naturalmente por grandes vitraux de la famosa casa Gaudin de París, y subir por la escalera principal, que se construyó con mármol de Carrara, Verona y Portugal.

Testigo de grandes momentos, caminaron por su escenario las grandes figuras de la opera, el canto y el ballet. Desde Aída, la ópera de Verdi, que inauguró las actividades del teatro, pasaron Arturo Toscanini, Enrico Caruso y Titta Rufo, Richard Strauss y Arthur Nikisch, Lily Pons, Igor Stravinsky, María Callas y Maia Plissetskaya, entre tantos otros.

Esa excelencia es la que intentará recuperar García Caffi: "Estamos en camino, son cosas que requieren tiempo, pero vamos camino a recuperar la excelencia de los cuerpos artísticos, recuperar la mística y los ideales. Van a estar presentes Daniel Barenboim, Zubin Mehta y la orquesta de la Scala de Milán, en fin... tantos otros artistas".

Así, tras más de 1100 días, el telón volverá a correrse para que la magia vuelva a deslumbrar. Que mejor que Luciano Pavarotti, para muchos el más grande tenor de la historia, para resumir lo que significa recuperar el Colón: "El teatro tiene un grandísimo defecto, su acústica es sencillamente perfecta. Imaginen lo que eso significa para un cantante: si uno hace algo mal, se nota enseguida...".

¿Qué más decir?

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1268045


Teatro Colón de Buenos Aires - (Reapertura 24 de mayo de 2010)

Atahualpa Yupanqui / El poeta sabio de la Argentina toda

Atahualpa Yupanqui
(Pergamino, Argentina - 31 de enero de 1908 – Nimes, Francia - 23 de mayo de 1992)
Ausencia y presencia de Atahualpa Yupanqui

Por Lil Rodríguez 23/05/10

Siempre le admiramos aunque no le conociéramos porque, por esas cosas de los medios, muchos de sus mejores temas salían con el crédito del mayor autor de obras del planeta: D.R. es decir, derechos reservados, o D.D., derechos en depósito, miserables fórmulas imperiales creadas para no cancelar los ya miserables estipendios a los creadores. “porque no engraso los ejes/ me llaman abandonao…”

Más tarde o más temprano sabríamos que esos temas pertenecían al alma universalmente argentina de Atahualpa Yupanqui, el creador del que se cumplen hoy 18 años de ausencia y que, paradójicamente, estará más presente que nunca el próximo martes 25 en los festejos Bicentenarios de la nación plateada.

El arriero va

Cuando uno se encuentra en el territorio argentino, hermoso y al Sur, con lo que más tropieza uno en con el sentido de pertenencia de ese pueblo con relación a sus valores culturales. Todos hablan con respeto (los quieran o no) de Borges, de Piazzolla, de Gardel, de Cafrune, de Mederos, de la Negra Mercedes Sosa (otra ausente presente en la fiesta Bicentenaria), de Almafuerte, de Goyeneche, de Cortázar… Y todos tienen, ahí sí unido el respeto al cariño, la referencia inconmensurable de Héctor Roberto Chavero, el Atahualpa de todos, surgido el 31 de enero de 1908 a la vida. (Algunos dicen que fue el 22).

"En aquellos pagos del Pergamino nací, para sumarme a la parentela de los Chavero del lejano Loreto santiagueño, de Villa Mercedes de San Luis, de la ruinosa capilla serrana de Alta Gracia. Me galopaban en la sangre trescientos años de América, desde que don Diego Abad Martín Chavero llegó para abatir quebrachos y algarrobos y hacer puertas y columnas para iglesias y capillas (...) Por el lado materno vengo de Regino Haram, de Guipúzcoa, quien se planta en medio de la pampa, levanta su casona, y acerca a su vida a los Guevara, a los Collazo, gentes 'muy de antes’..." ("El canto del viento", I ).

Desde pequeño la guitarra sería su novia. "Muchas mañanas, la guitarra de Bautista Almirón llenaba la casa y los rosales del patio con los preludios de Fernando Sor, de Costes, con las acuarelas prodigiosas de Albeniz, Granados, con Tárrega, maestro de maestros, con las transcripciones de Pujol, con Schubert, Liszt, Beethoven, Bach, Schumann. Toda la literatura guitarrística pasaba por la oscura guitarra del maestro Almirón, como derramando bendiciones sobre el mundo nuevo de un muchacho del campo, que penetraba en un continente encantado, sintiendo que esa música, en su corazón, se tornaba tan sagrada que igualaba en virtud al cantar solitario de los gauchos" ("El canto del viento", II).

No pudo acceder a estudios completos debido a la situación económica familiar y a los constantes traslados que ya a los 9 años lo llevaban a Tucumán y más adelante a Buenos Aires, Entre Ríos, el Uruguay, Santa fe, Rosario, Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy, La Puna, La Rioja, etc.

Se ganó el sustento de muchas maneras: Hachero, arriero, cargador de carbón, entregador de telegramas, oficial de escribanía, corrector de pruebas y hasta periodista, pero sin abandonar nunca la sonoridad de la guitarra ni la musa inspiradora de su tránsito vital, según quienes han estudiado en profundidad su vida y obra.

En 1922, a los 14 años, adoptó para siempre su nombre de batalla. No eligió cualquier nombre, no. Chavero eligió uno quechua: Atahualpa Yupanqui, “el que viene de viejas tierras para decir algo”. Tenía clara su condición de juglar, que ya para la década de los treinta se materializa en discos. Pocos años más tarde publica sus primeros libros: "Piedra Sola" (Jujuy) en 1941 y "Aires Indios" (Montevideo) en 1943.
En 1937 conocería a la franco-canadiense Paule Pepin Fitzpatrick, “Nenette”, a quien se uniría en 1946, luego del fracaso de su primer matrimonio con María Martínez. “Nenette” fue el gran amor de su vida y con ella compartió la autoría de decenas de canciones, que ella firmó con el seudónimo de Pablo del Cerro.

Atahualpa se hizo militante comunista en 1945, (algo que no gustó mucho al peronismo) y cuando asumió una actitud crítica fue silenciado prohibiéndose incluso que otros cantores interpretaran sus temas. Fue detenido y encarcelado en ocho oportunidades. En una de esas libertades hizo del Cerro Colorado, en la provincia de Córdoba, su refugio y su fortaleza. Ya había estado en Europa, y ofrecido conciertos en el bloque comunista, y en la Francia de Edith Piaf. De esa etapa es el episodio vivido en la España de Francisco Franco cuando le pidieron por adelantado las letras de sus canciones para un disco. . “Yo no le pido permiso a nadie para cantar mis canciones”, contestó Yupanqui, y se fue de España.

Presencia

Cuando fue levantado el veto oficial en su país, Atahualpa reforzó sus conciertos y sus grabaciones dando a conocer temas inmortales como “Le tengo rabia al silencio” y “Luna Tucumana” para posteriormente dar a conocer “Los ejes de mi carreta”, “El payador perseguido” y su extraordinario libro “El canto del viento”.

Fue alma del festival de Cosquín y acumuló reconocimientos de todo el mundo, incluyendo una distinción en Venezuela.

Ya en la década de los ochenta logró cristalizar la Fundación Yupanqui en Cerro Colorado definiéndolo ‘como un sitio para los enamorados de la ecología, la naturaleza, la botánica, los idiomas antiguos. En definitiva un hecho cultural en una zona alejada de todo, y un canto de amor muy personal a la tradición’, según relatos periodísticos.

En 1990 falleció su compañera, Nenette y Ata quedó muy afectado. Dos años más tarde moría en Nimes, Francia, el 23 de mayo de 1992, a los 84 años de edad. Sus restos descansan ahora en el Cerro Colorado, Provincia de Córdoba, República Argentina.

http://www.aporrea.org/actualidad/a101147.html

Atahualpa Yupanqui – El Alazán

Duke Ellington / The Great King of Jazz

Duke Ellington
(Washington D.C.April 29 1899 - New York, May 24 1974)


Duke Ellington, el Aristócrata del Jazz.

Por Alfredo Rodríguez.

Sin preocupaciones económicas en su familia (en unos lados se dice que su padre era mayordomo en la Casa Blanca, y en otros que tenía el mismo trabajo en una casa pudiente), Ellington se convertiría con el paso de los años en un compositor enormemente prolijo, hasta el punto de que se cifran sus composiciones en unas 2.000, eso sin contar las que fue escribiendo en cualquier papel que caía en sus manos, y cuya influencia musical se sigue proyectando en nuestros días.

Pronto empezó a adentrarse en el mundo de la música gracias a lecciones de piano, y con 17 años tendrá lugar su debut profesional, y empieza a ver la posibilidad, que se concretará poco tiempo después, de dejar los estudios para dedicarse de lleno a la música. La primera formación de Duke Ellington serán los Duke’s Serenaders, que después se transformarían en The Washingtonians. A esas alturas, en los albores de los años 20, todavía sigue vinculado a su ciudad natal, hasta que se siente atraído por el ambiente musical de la ciudad de Nueva York, a la que se traslada en 1923.

Allí empezará a tocar en algunos de los clubes de mayor renombre, hasta recalar en el mítico Cotton Club, un local ubicado en el barrio de Harlem y regentado por el mafioso Owney Madden, en el que se codeaba toda la alta sociedad blanca de la ciudad y en el que desarrollará el conocido como jungle style (estilo jungla), nombre que le viene por la imitación tanto con las voces como de los instrumentos, de sonidos africanos y que daban un aire exótico a los temas.

Las retransmisiones que se hacía por radio en directo desde el Cotton Club, introdujeron la música de Ellington y su grupo en muchos hogares y eso les convirtió en un grupo muy famoso que, cuando dejó el club, ya era un grupo consolidado y muy maduro musicalmente hablando. Eran los años dorados de las big band, entre las que también destacaban y la de Benny Goodman, Glen Miller o Lionel Hampton, por citar sólo tres, y en los que Ellington ya había dejado tras de sí temas tan inolvidables como Mood Indigo o Sophisticated lady.

Los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, marcaron el declive de las big band, lo que no arredró a Duke Ellington, que se empeñó en seguir al frente de su grupo al que mantenía gracias a los ingresos que recibía por los derechos de autor de sus temas, lo que no impidió que algunos de los mejores músicos se fueran en busca de otros horizontes musicales. Con la formación renovada, Ellington es invitado a participar en el Festival de Jazz de Newport en el año 1956, en lo que marcará el resurgimiento del ave fénix de sus cenizas.

Según nos dice la página apoloybaco: “Con estos músicos y cierto escepticismo, Ellington es invitado a actuar en el Festival de Jazz de Newport de 1956. Lo que pasó aquella noche está escrito en los anales del jazz. Duke Ellington, sacó de su chistera creativa dos temas compuestos en 1937, Diminuendo in Blue y Crescendo in blue y decidió encima del escenario servirlos unidos, separándolos simplemente con un interludio a cargo de Gonsalves. Y ahí se produjo el milagro. Los arrolladores veintisiete “chorus” seguidos de jazz puro y duro que improvisó el saxofonista, empujado por una rítmica ejemplar le dieron la vuelta al historia. Las sillas volaban por encima de las cabezas de los atónitos y rugientes espectadores y a la mañana siguiente toda la prensa anunciaba en grandes titulares “Ellington ha vuelto” .

A lo largo de los años de su carrera musical, Ellington no dejó de componer en ningún momento, y no sólo temas de jazz, sino que también nos ha dejado baladas, blues, música para ballet y conciertos sacros, algo a lo que también ayudó la diferente procedencia de los músicos de los que se rodeó y su propia habilidad para absorber todo lo que acontecía musicalmente a su alrededor. “Tanto apreciaba Ellington las personalidades musicales de los miembros de su banda, que escribía cada parte de una composición para resaltar el talento y la habilidad de músicos específicos, mezclando con gran imaginación las ideas de ellos con las suyas”, escribe Roberto Barahona en un artículo publicado en el periódico chileno El Mercurio el 18 de abril de 1999.

Un cáncer se llevó por delante la vida de Duke Ellington, terminando con una leyenda viva convertida en leyenda imperecedera.

http://alenarterevista.wordpress.com/
Jungle Nights In Harlem - Duke Ellington and his Cotton Club Orchestra (1930)

sábado, 22 de mayo de 2010

Dave Holland & Overtone Quartet / Bridgestone Music Festival Buenos Aires


Doble programa jazzero excepcional

EL OVERTONE QUARTET DE DAVE HOLLAND Y EL GUITARRISTA KURT ROSENWINKEL TOCARAN HOY

Sábado, 22 de mayo de 2010

El contrabajista que brilló junto a Miles Davis se presentará con su notable cuarteto, mientras que el guitarrista formado por Gary Burton lo hará en formato de trío. Será en el Bridgestone Music Festival, en el Teatro Coliseo.

Por Diego Fischerman

Dave Holland, aquel contrabajista que reemplazó a Ron Carter y formó parte de una de las revoluciones de Miles Davis, es, desde hace más de treinta años, una de las figuras fundamentales del jazz. Su Conference of the Birds, con Anthony Braxton y Sam Rivers, el grupo Circle y sus grupos chicos, desde el cuarteto que registró el fundamental Jumpin’ In (1984) hasta la actualidad, además de sus incursiones en el terreno de las grandes formaciones (la big band que grabó What Goes Around y Overtime) marcan una trayectoria ejemplar, definida tempranamente cuando, aún en su Inglaterra natal, decidió que sería un músico de jazz neoyorquino.

El guitarrista Kurt Rosenwinkel, nacido en 1970, seis meses después de que el contrabajista formara parte de la legión que transformó el jazz con Bitches Brew, es, también, una de las caras fundamentales del jazz de Nueva York. Y su historia, como la de Pat Metheny, tiene como mentor al vibrafonista Gary Burton, que fue su profesor en la escuela Berklee de Boston y en cuyo grupo comenzó su carrera profesional. Holland fue quien, en los ’70, tomó las enseñanzas de los grandes maestros de la década anterior –Scott LaFaro, Gary Peacock– y las llevó a un nivel de virtuosismo nunca visto. Y fue, también, uno de los que pasó por el free jazz más atonal y rítmicamente más osado, y volvió para contarlo. Rosenwinkel pertenece a una generación que aprendió en las academias y que, claro, tuvo a Holland como uno de sus modelos. Para él, las rupturas de fines de los ’60 son parte de la tradición, tanto como Jelly Roll Morton o las sesiones de Charlie Parker con Gillespie. Veinticuatro años –un buen cuarto de siglo de historia del jazz– lo separan de Holland. Sin embargo, ambos encarnan lo mejor y lo más actual del género. Y ambos lo mostrarán en Buenos Aires mañana, cuando a partir de las 21.30 se presenten en la edición porteña del Bridgestone Music Festival, que se llevará a cabo en el Teatro Coliseo (Marcelo T. de Alvear 1125).

Rosenwinkel, que mañana tocará en la Sala Lavardén de Rosario, llega hoy a Buenos Aires con su trío, conformado por él en guitarra eléctrica, Eric Revis en bajo y Ted Poor en batería. Y Holland lo hace al frente (por más que él asegure que se trata de un conjunto de pares) de un verdadero supergrupo, el Overtone Quartet. Junto a él están el saxofonista Chris Potter, el pianista Jason Moran y el baterista Eric Harland. “Son músicos excepcionales que le dan un enfoque muy personal a su música, aunque lo hacen sobre la base de la tradición del jazz”, dijo Holland acerca de los otros tres integrantes del Overtone. “Ya había tocado con cada uno de ellos, sobre todo con Chris (Potter), pero como cuarteto arrancamos el año pasado. El grupo es un verdadero colectivo, por lo que no hay realmente un líder que sobresale. Cada uno de nosotros ha compuesto cosas para la banda y eso ha dado una fluidez orgánica en la música que permite una gran interacción y diálogo. Sólo necesitamos al público para seguir el viaje musical con nosotros. Y estamos ansiosos de presentar este nuevo material en Buenos Aires.”

Sobre sus maestros y el camino recorrido hasta hoy, agregó: “Tocaba el bajo siendo un adolescente de poco más de 14 años y, después de escuchar unos discos de Ray Brown y Oscar Peterson, me compré un contrabajo y empecé a practicar con el nuevo instrumento sobre los discos en los que ellos tocaban. Recuerdo esa época perfectamente y siento que al poco tiempo llegó lo de Miles, los grupos, el quinteto y mis propios discos. Pero creo que lo bueno es que conservo el entusiasmo y las ganas de seguir tocando. Agradezco no haber perdido eso, que es lo que me hace continuar con proyectos como mi propio sello discográfico”. Rosenwinkel, por su parte, dijo estar “realmente contento de poder tocar en Buenos Aires. Lo esperaba desde el año pasado”. Y es que efectivamente en 2009 debió postergarse la visita del grupo a causa de la epidemia de gripe A. “El trío con el que estaremos allí –cuenta el guitarrista– está formado por músicos con una naturaleza poderosa y de gran alcance. Son dos de mis músicos favoritos, tenemos mucha química como trío y estoy feliz de traer esta banda a América del Sur, donde vamos a presentar nuestro último disco, Reflections. Es una suerte de recorrido por standards, pero seguramente tocaremos temas viejos de otros discos míos.”

http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/3-18043-2010-05-22.html

http://www.daveholland.com/


Dave Holland - Mr. P.C -Bass Solo - Kiel -Germany

jueves, 20 de mayo de 2010

United Jazz Festivals Newport, New York & Barcelona

Barcelona - Catalunya
Los míticos Festivales de Jazz de Newport & New York se alían con el de Barcelona.

BARCELONA- George Wein es una figura mítica dentro de la historia del jazz. En 1954 inventó lo que sería el festival de música. Todo lo que vino después, Woodstock, Glastonbury, Sónar o Primavera Sound, nació el verano del 54 en la pequeña localidad de Newport. A partir de ese año, sus hazañas no hicieron más que crecer. En 1956 revivió la languideciente carrera de Duke Elligton con un concierto hoy legendario. Reunió a Mahaila Jackson con Louis Amstrong o estrenó el célebre sexteto con Miles Davis, Thelonious Monk y John Coltrane. «Fuimos los primeros en mezclar varios tipos de música, en unir lo tradicional, con el be bop y nuestro ejemplo lo siguieron los demás», afirmó anoche en su visita a la Ciudad Condal.
El promotor actuó ayer, por primera vez en su vida, en un concierto de una hora con un trío de jazz. El concierto fue una constatación del acuerdo de colaboración de los festivales que dirige, el de Newport y el de Nueva York, con el Festival de Jazz de Barcelona. «Este acuerdo nos abre las puertas a un nuevo futuro. Queremos traer a Estados Unidos artistas de aquí y viceversa. Será una colaboración muy fructífera», señaló Tito Ramoneda.

http://www.larazon.es/noticia/6394-los-miticos-festivales-de-jazz-de-newport-y-new-york-se-alian-con-el-de-barcelona


38 Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona (2006)


Festival de Jazz de Barcelona se hermana con los de Newport y New York
EFE - 17/05/2010

Barcelona, 17 may (EFE).- El legendario músico promotor de Jazz y empresario estadounidense George Wein ha hecho público hoy el hermanamiento entre los Festivales de Newport y de Nueva York, ambos fundados por él, y el Festival Internacional de Jazz de Barcelona, que el próximo noviembre celebrará su 42 edición.

A sus 84 años, Wein quiere apostar por los músicos más jóvenes: "los años pasan y los grandes nombres continúan siendo importantísimos, pero también es básico incluir a los músicos más jóvenes, aquellos que se han beneficiado de una mejor formación musical", ha asegurado.
El presidente de The Project, Tito Ramoneda, la empresa promotora del Festival de Barcelona, ha considerado que este hermanamiento "abre puertas y responde al contexto en el que nos encontramos, el de un mundo globalizado en el que las culturas nos obligan a cruzar el eje norte-sur y este-oeste".

El director artístico del Voll Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona, Joan Anton Cararach, ha destacado: "estar presentes en los festivales de Newport y de Nueva York nos da una gran posibilidad de promocionar Barcelona a partir de la cultura".

Wein, considerado "una leyenda viva" en el mundo del Jazz, aprovechará también su paso por Barcelona para presentar el "George Wein Barcelona Trio" junto al contrabajista Horacio Fumero y el batería Jordi Rossy, ambos músicos catalanes de gran proyección internacional.

http://www.elconfidencial.com/ultima-hora/festival-barcelona-hermana-newport-nueva-20100517.html
41 Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona (2009)


http://www.barcelonajazzfestival.com/



http://www.nycjazzfestival.com/






http://www.newportjazzfest.net/

miércoles, 19 de mayo de 2010

Gustavo Cerati / Cuando pase el Temblor


Operaron con éxito a Gustavo Cerati, pero su estado es crítico, seguirá en terapia intensiva.

Lo informó un médico que lo intervino; el músico, que sufrió un ataque de isquemia cerebral en Caracas, permanecerá en observación; el director del Instituto Fleni podría viajar; el especialista aseguró que es improbable su recuperación total.

Miércoles 19 de mayo de 2010 03:21

Gustavo Cerati fue operado con éxito anoche en Caracas, ciudad donde el músico sufrió una isquemia cerebral. Herman Scholtz, médico que lo intervino, aseguró a la señal de cable TN, que fue trasladado a terapia intensiva, donde permanecerá en observación las próximas 72 horas ya que "sigue padeciendo una situación crítica".

La operación se realizó en el hospital La Trinidad, de la capital venezolana, con el objetivo de "aliviarle la presión intracraneal". Scholtz dijo que Cerati "salió bien de la operación y se encuentra en cuidados intensivos" y consideró que es "muy temprano para hablar de riesgo de vida". Las próximas 72 horas serán decisivas para conocer la evolución del artista.

El médico manifestó que el músico tuvo una isquemia cerebral "que venía evolucionando en forma adecuada" pero que "en las últimas horas ha llegado a un gran edema cerebral y un deterioro progresivo de sus cuadros neurológicos".

La intervención consistió en "sacar una parte del hueso del cráneo para darle espacio al cerebro".

El ex vocalista de Soda Stereo ofreció un recital en la capital venezolana el domingo pasado, luego del cual se descompensó y fue internado. Inmediatamente comenzaron a circular los rumores entre sus seguidores. Ante las distintas versiones, se publicó un comunicado en la página oficial del cantante.

Comunicado en la web oficial. "Ante las distintas versiones que han comenzado a circular acerca del estado de salud de Gustavo, es nuestra intención acercar la versión oficial, actualizada, de la situación", dice el parte publicado en la web.

"Lo que Gustavo ha sufrido como consecuencia de una fuerte subida de presión arterial, es una isquemia transitoria cerebral. Se encuentra internado, en estado estacionario, en el Centro Médico La Trinidad de la ciudad de Caracas y allí continuará durante los próximos días bajo observación, sometido a distinto tipo de exámenes y a la espera de su recuperación", prosigue el breve comunicado.

En tanto, los fanáticos del artista de todas partes de América latina están pendientes de la evolución del estado de salud de su ídolo. En Twitter son innumerables los mensajes de apoyo.

Pero las muestras de afecto no sólo surgieron de su incondicional público sino también de artistas muy cercanos a él. "Desde que me enteré, estoy inmerso en una gran tristeza. Lo único que hago es rogar que las cosas salgan bien. Es increíble lo que está pasando", aseguró consternado Charly Alberti, ex baterista de Soda Stereo

"Es improbable su recuperación total". Lo aseguró el Dr. Ramón Leiguarda, presidente del Instituto Fleni, quien decidirá hoy si viaja a Caracas entre el viernes y el sábado.

La familia de Gustavo Cerati se comunicó con él para que interviniera en la rehabilitación del músico, quien permanece en terapia intensiva con un coma inducido y con respirador artificial. Las próximas 72 horas serán decisivas para la evolución del ex líder de Soda Stereo. "Viajaría con el jefe de Neuro Incentivismo, Dr. Wainstein", comentó el especialista, quien también se refirió a la recuperación. "Es improbable que la recuperación sea total".

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1266363



Grave estado de Gustavo Cerati trasciende a medios de EEUU y Europa

Miércoles, 19 de Mayo del 2010 17:22 hrs

ABC News de Estados Unidos, El País de España y BBC de Londres informaron sobre el terrible suceso por el que atraviesa el ex líder de Soda Stereo.

La noticia del estado de salud del cantante Gustavo Cerati conmociona a toda la comunidad musical del mundo y, claro, la prensa internacional no escapó de ello.

Muchos medios de comunicación han cubierto los pormenores sobre el grave momento por el que atraviesa el ex líder de Soda Stereo.

ABC News colocó en su sección de entretenimiento que Cerati se sometió a una delicada cirugía al cerebro."Argentine Rocker Cerati Undergoes Brain Surgery. Argentine Rock Star Gustavo Cerati in intensive care after brain surgery in Venezuela" (la estrella del rock argentino Gustavo Cerati es sometido a cirugía de cerebro en Venezuela)", señala el medio de comunicación en mención.

BBC de Londres colocó en su portada de noticias: "Cerati sigue en estado crítico". Ello, luego de que se supiera los más recientes informes sobre el daño sufrido en el cerebro del cantante.

Mientras tanto El País de España informó que "se agrava el estado de salud de Gustavo Cerati".
"El ex vocalista de Soda Stereo se encuentra en terapia intensiva tras ser operado el martes en Caracas", indicó.

Cabe indicar que la prensa de Latinoamérica se encargó por su lado de detallar los pormenores del terrible hecho.
El Nacional de Venezuela rebotó la entrevista que realizó la tarde del martes al neurólogo Vladimir Fuenmayor, miembro del cuerpo médico de Centro Médico Docente La Trinidad."La evolución de Gustavo Cerati es impredecible", dijo el galeno en rueda de prensa.

Por otro lado, el diario El Universal de Venezuela colocó en su portada: "Cerati se mantiene en estado crítico tras la operación".

http://www.rpp.com.pe/2010-05-19-grave-estado-de-gustavo-cerati-trasciende-a-medios-de-eeuu-y-europa-noticia_266144.html

Gustavo Cerati - Av. Alcorta (Acustico Fm 100)

martes, 18 de mayo de 2010

Aníbal Troilo / 35 Años sin el Bandoneón Mayor de Buenos Aires



Aníbal Troilo: En el Olimpo de la argentinidad

Hoy se cumplen 35 años de la muerte del máximo bandoneonista del tango. Compositor, director de orquesta, maestro de cantores y hombre generoso, dejó un sello indeleble en la música de la ciudad.

Por: Eduardo Parise 18/05/2010

La historia empezó cuando aquel chico, que se llamaba Aníbal Carmelo Troilo y vivía en el barrio de Palermo, jugaba con una almohada: apoyándola sobre sus rodillas, mientras escuchaba tangos por la radio, la estrujaba simulando que tocaba un bandoneón. Pero para que empezara la leyenda de Pichuco, el mito de El Gordo, debería pasar algo más de medio siglo. Habría que esperar hasta el 18 de mayo de 1975, hace hoy exactamente 35 años, para saber que ese hombre que desaparecía físicamente estaba incorporándose para siempre como un nuevo dios al Olimpo de la argentinidad.

¿Qué era lo que había hecho para que semejante devoción, en aumento aunque pasen años, tuviera tamaña repercusión? Simplemente había vivido apenas seis décadas repartiendo talento como artista y generosidad como ser humano.

"Era un hombre de un refinamiento exquisito. Pichuco fue lo que se dice un elegante tanto en el vestir como en el pagar, porque ha levantado muertos delante mío con una elegancia tal que nadie se daba cuenta quién pagaba la mesa", recuerda el poeta Horacio Ferrer, avalando aquello de que Troilo sólo fue flaco con él mismo, como dice uno de sus versos que lo evoca.

Aquel refinamiento, según Ferrer, estaba presente en todos sus actos. "Pichuco sabía disfrutar con la música, pero también con un champán o un vermú de primera; es que la misma elegancia que tenía para vestir la usaba para vivir".

Para entonces ya había pasado el tiempo de formación junto con otros grandes como Elvino Vardaro, Osvaldo Pugliese, Ciriaco Ortiz o Alfredo Gobbi. Ya había actuado con Julio De Caro, Juan Maglio, Juan D'Arienzo o Angel D'Agostino. También había quedado atrás aquel debut profesional con 14 años en el Petit Colón de Córdoba y Laprida y aquel 1º de julio de 1937 cuando en el cabaret Marabú, con sólo 23 años, se presentaba dirigiendo su propia orquesta.

Y como si eso fuera poco, también había encontrado a Dudui Ida Calahi, una mujer bellísima nacida en Grecia, pero que estaba aquí desde sus 6 años. Esa mujer era Zita ("Troilo con pollera", la define Ferrer) con quien se casó en 1938 y quien lo acompañó hasta el final, más allá de algunos terremotos temporarios en la relación. "Es que por Zita yo volteé toda la estantería", solía decir Troilo para hablar de ese ángel guardián que dedicó mucho de su vida a ponerle un paraguas protector a la lluvia de excesos de alcohol y otras cuestiones. "Es cierto, tenía excesos, pero hay muchos otros en todas las disciplinas que tienen los mismos excesos, pero no son Troilo", agrega Ferrer.


De Troilo se sabe mucho de lo que hizo como bandoneonista y músico, pero poco de su talento como cantor, algo que desarrolló cada vez que eligió la voz de un intérprete para que fuera un instrumento más en la estructura perfecta de su orquesta. "Es que escuchaba mucho y tenía una idea gardeliana para cantores a quienes, aun no siendo gardelianos, les elegía un repertorio con esa tendencia, lo que lo hacía genial", explica Ferrer evocando a un Pichuco cantor "con una voz chiquita, pero maravillosa".

El mismo concepto tiene Guillermo Fernández, un cantor que lo tuvo como maestro cuando era Guillermito. "Lo conocí a los 12 años en un programa llamado Tangolerías que en Canal 11 conducía Roberto Galán. Desde hacía seis años yo cantaba en las cantinas y en esos lugares el que más grita es el que más aplausos cosecha", recuerda Fernández. Y agrega: "Entonces, en un ensayo, cuando empecé a cantar Barrio de tango, Troilo me paró y me dijo 'pibe, no se grita; en el tango no se canta con el capital, se canta con el interés', algo que dijo le había enseñado don Carlos Di Sarli".

"Así fue como en su departamento de la calle Paraguay y en siete u ocho clases de una hora cada una Troilo me enseñó eso de que hay que cantar de adentro para afuera", dice Fernández al evocar esos momentos en los que Pichuco le pasaba las melodías para decirle cómo se canta. "Troilo no sabía canto, pero era maestro de cantores, sabía poca música pero era maestro de música y tocaba poco el bandoneón pero era maestro de bandoneonistas. Era impresionante".


Esa misma disciplina se reflejaba en su orquesta, una máquina precisa donde cada integrante (Troilo incluido) era un engranaje calibrado al máximo. "La orquesta ensayaba todos los días a las cuatro de la tarde en el cabaret Tibidabo y cada noche, cuando subía al escenario para actuar, mantenía hasta una disciplina estética", cuenta Ferrer. Eso iba hasta el extremo de tocar sin partitura sobre el atril. "Es que los músicos sabían 120 partituras de memoria, porque El Gordo decía que había que distinguir los trabajos del músico sobre el escenario: el de leer y el de expresarse; y si los músicos sabían todo de memoria el único trabajo que tenían para hacer era el de expresarse".

Cuando murió, el velatorio se hizo en el hall del San Martín, en la calle Corrientes que tanto amó. "Recuerdo que había una fila de cuatro personas en cada hilera, que daba vuelta toda la manzana. A cada uno de ellos él los había invitado con una copa, les había dado un beso, les había hecho algún regalo; todos ellos habían recibido algo de Troilo", concluye Ferrer. Y sintetiza ese momento con una imagen que le quedó grabada. "Recuerdo que me quedé frente al cajón mirándolo y me di cuenta de algo impresionante: Pichuco estaba todo muerto menos sus manos; eran las mismas manos que tanto habían hablado y seguirán hablando". Treinta y cinco años después, aquella visión del poeta se mantiene imbatible.«

http://www.clarin.com/diario/2010/05/18/espectaculos/c-02196727.htm

http://www.troilo.com.ar/


Anibal Troilo y su Orquesta- Quejas de Bandoneon

Hank Jones / La Sensibilidad Refinadamente Exquisita de Mr. Jones


El Jazz pierde a Hank Jones, el decano de los pianistas.

18 Mayo de 2010 - LA RAZÓN – Madrid

El músico estadounidense Hank Jones, conocido como «el decano de los pianistas de jazz» y admirado por su trabajo junto a figuras como Ella Fitzgerald, ha fallecido en Nueva York a los 91 años, informó ayer su representante. Jones, famoso también por acompañar al piano a Marilyn Monroe mientras ésta le cantaba un célebre feliz cumpleaños al presidente John F. Kennedy en 1962, murió el domingo tras una breve enfermedad en el hospital neoyorquino donde estaba ingresado, según explicó a Efe su mánager, Jean-Pierre Leduc.

El conocido pianista, nacido en Misisipi en 1918, permanecía aún en activo tras siete décadas sobre los escenarios e incluso tenía previstas varias actuaciones junto a otros músicos para finales de este mes en el conocido club Birdland de Nueva York, uno de los templos del jazz de la Gran Manzana, informó Leduc.

Durante casi tres décadas, Jones, respetado por sus compañeros de profesión por su gran creatividad y versatilidad, se especializó como acompañante de grandes voces, como Ella Fitzgerald (1917-1996), y ejercitó su pasión por la música en varios programas de radio y televisión, aunque también destacó como músico de estudio. Esos trabajos le otorgaron un segundo plano que empezó a fundirse cuando cumplió los 60 años, una época en la que empezó a ofrecer actuaciones con su propio nombre en cartel y a liderar varios tríos que consiguieron el apoyo del público y la crítica neoyorquinos y con los que viajó por medio mundo. En ese tiempo unió fuerzas con el bajista Ron Carter y Tony Williams, que provenían del quinteto de Miles Davis (1926-1991), para formar el llamado Great Jazz Trio en 1976, un grupo que fue cambiando de integrantes a lo largo de los años.
Más de 500 discos

En las dos últimas décadas, Jones aprovechó para grabar multitud de álbumes y colaboraciones en directo y, según su página web, apareció en más de 500 discos en solitario y junto a las figuras más importantes del jazz de su tiempo.

Aunque en su familia no era el único músico de jazz, dado que también destacaron sus hermanos Thad y Elvin, Jones tuvo que luchar con el rechazo inicial de su padre, que consideraba al jazz una música del demonio. Nacido el 31 de julio de 1918 en Vicksburg (Mississippi), Jones creció en Pontiac (Michigan), y allí comenzó a tocar en bandas locales. También lo hizo en Buffalo y Ohio, antes de dar el salto a Nueva York en 1943. Allí tocó con artistas como Hot Lips Page, Billy Eckstine y Coleman Hawkins.

En Jazzaldia

Hank Jones recibió numerosos galardones, entre ellos algunos gubernamentales de EE UU, a lo largo de una carrera en la que firmó cinco nominaciones a los premios Grammy de la música, cuya organización lo premió en 2009 con el galardón a toda una carrera. Jones fue premiado asimismo en 1996 con el premio Donostiako Jazzaldia, el galardón del Festival de Jazz de San Sebastián, una cita a la que acudió en más de una ocasión. La última fue en 2009.

http://www.larazon.es/noticia/2324-el-jazz-pierde-a-hank-jones-el-decano-de-los-pianistas

Hank Jones Trio - Live At Vienna 1994 - Round About Midnight