jueves, 2 de diciembre de 2010

Sue Mingus / Mingus Dynasty en Buenos Aires


"No quería que su legado se perdiera”

Entrevista Sue Mingus La viuda de Charles habla del septeto Mingus Dynasty, estrella del Festival Buenos Aires Jazz 2010.

02.12.2010
Por Sandra De La Fuente

Cuando Charles murió tuve miedo de que su música no volviera a tocarse. La gente tenía en muy alta estima al Mingus contrabajista, al líder de banda, también a la personalidad que podía iluminar un escenario. Pero no conocía al Mingus compositor. Nadie tocaba Mingus como se tocaba a Ellington. No quería que su legado se perdiera”, dice por teléfono Sue Graham Ungaro, la última de las cuatro mujeres que tuvo el músico y, tal vez, la más activa militante en la difusión de su obra.

Sue mantiene una agenda cargada de eventos relacionados con su marido. El primer grupo que creó -un septeto que lleva el nombre de uno de sus discos más inspirados, Mingus Dynasty- abrirá este viernes la nueva edición del Buenos Aires Jazz, a las 20.30 en el Coliseo. “La gente se preguntaba cómo podía hacerse la música de Mingus sin él. La razón era la calidad de su obra. Sus composiciones trascendieron su presencia física”.

En un principio la banda estuvo integrada por músicos que habían tocado con el propio Mingus. Ahora la integran otros que no lo conocieron.


¿Se percibe algún cambio en el sonido, alguna forma de progreso en sus versiones? Al principio, el grupo hacía de cuenta que Mingus todavía estaba. Muchos de los músicos que hoy tocan usaban pañales cuando Mingus tocaba. Descubrimos que no necesitamos ese sentido de pertenencia para que su música suene. Una de las cosas más interesantes de su música es que deja mucho espacio para que cada músico exprese su personalidad. Los músicos de hoy tocan según lo que se mueva en la atmósfera actual, como lo hacían los que tocaron con Mingus. Y allí está el progreso.


¿No se inhiben frente a un repertorio que debe sonarles como tradición dentro del jazz? Suelen decir que la música de Mingus era tan avanzada para su época que lo sigue siendo todavía hoy. Con Moods in Mambo , que escribió en los ‘40, hacen la broma de que deberían ponerse un traje espacial para interpretarla.




Ud. viene del mundo del teatro, ¿cómo conoció a Mingus?
En un club de jazz. Yo no sabía nada de esa música y en esa época trabajaba en una película de Robert Frank. Frank quería tener una banda de sonido de jazz y yo lo acompañaba a escuchar música. Habíamos escuchado a Gillespie y fuimos al Five Spot a escuchar a Mingus. El jazz estaba en su pico más alto. Era casi medianoche, pero había mucho ruido y un clima festivo. De pronto, en el medio de esa marea humana, noté a un hombre sentado en un rincón, meditando en el caos, en completa paz. No pude evitar mirarlo. Y ése era Mingus. Supe que era él después, cuando empezó a tocar.

¿Conversó con él esa noche?
Sí. Creíamos que Ornette Coleman escribiría la banda de sonido de esa película. Le pregunté a Mingus sobre él y me preguntó si yo era su novia. O “su vieja dama”, dijo. Yo no sabía qué quería decir, así que medio ofendida le pregunté si pensaba que yo podía ser la madre de Coleman. En ese momento, supimos que nuestro encuentro era la colisión de dos mundos diversos.

Era un hombre muy explosivo. ¿Fue difícil convivir con él?
Sus actitudes públicas no tenían que ver con su personalidad privada. Se manifestaba en la defensa de la comunidad negra. Pensaba en voz alta y sus peleas salían en titulares. Decía que si uno no consigue un titular, no consiguió nada. Y llegaba ahí a través del enojo, rompiendo un contrabajo o peleando. Pero Mingus real era tranquilo. Un hombre que uno sorprendía a media noche componiendo y que respondía: “Dios me silbó una melodía que debo escribir”.


http://www.clarin.com/espectaculos/queria-legado-perdiera_0_382761740.html


-Mingus Dynasty - Original Legacy Band