Experimentalismo/ Un creador original
Viernes 28 de octubre de 2011
Por Pablo Gianera LA NACION
Antes de ser uno de los compositores más originales del paisaje musical europeo, a los 15 años, en Graz, Peter Ablinger tenía dos intereses exclusivos: el diseño gráfico y el free jazz . Era hacia fines de los años setenta. Ablinger pintaba y estudiaba piano y jazz en el Conservatorio de Graz. Pero la corriente entre la pintura y la música tenía una dirección única. Más de una vez, el propio compositor explicó que todo lo que había aprendido sobre arte lo trasladó luego a la música, que el aprendizaje fue de lo óptico a lo sonoro, y nunca al revés. Radicado en Berlín desde 1982, Ablinger es un compositor cuya poética, aunque inequívocamente europea, incorporó productivamente las grandes líneas del experimentalismo estadounidense.
Dentro del Ciclo de Música Contemporánea del Complejo Teatral de Buenos Aires, el jueves 10 (a las 20.30 en el Teatro San Martín) y el sábado 12 de noviembre (también a las 20.30, pero en el Centro de Experimentación del Teatro Colón), se presentarán dos de sus obras, tan especulativas como el pensamiento mismo de Ablinger: en el primero de los conciertos, se verá una pieza para ensamble y video con materiales sonoros y visuales registrados por él mismo en su visita a Buenos Aires de 2007; en el segundo, parte de Voices and Piano , una serie aún en curso sobre las voces de personajes célebres tomadas de grabaciones diversas (entrevistas, discursos, lecturas) de Morton Feldman, Guillaume Apollinaire, Martin Heidegger, Marcel Duchamp y Jorge Luis Borges, entre muchos más. Ablinger somete esas voces a una especie de radiografía espectral, de tal modo que la voz grabada parece determinar las alturas e incluso la dinámica del piano. Según explicó en una ocasión el compositor, "la parte para piano es el análisis de la voz". El efecto de las piezas es fantasmal: son voces auténticas pero muertas, encerradas en una pista de audio, que mantienen con el piano un diálogo imposible y, sin embargo, real. La mimesis instrumental del habla depara una fascinante mascarilla funeraria. Cada pieza (a veces, como en la de Apollinaire, casi canciones) es motívica en la medida en que lo son las entonaciones de las voces. En la de Borges, por ejemplo, el piano tartamudea como el escritor. Ablinger parece convencido de que en el fondo de cada voz habita una melodía secreta.
-¿Qué debe tener una voz para que se integre en el ciclo de Voices and Piano ? ¿Es una relación con la voz o con el individuo?-La voz y la personalidad no pueden separarse del todo. Sin embargo, obligado a responder, diría: la voz. Con todo, decidí trabajar con voces que no había oído antes. Había voces "dentro de mí"; por ejemplo, la de Feldman. No la había escuchado nunca, pero me había imaginado perfectamente cómo era. ¡Lo curioso es que, al final, esa imaginación sonora resultó completamente equivocada!
-¿Tiene pensado incluir su propia voz en el ciclo?-¡No! En cierto modo, todas las voces juntas son algo parecido a un autorretrato, así que mi propia voz sobraría y no podría integrarse en ese retrato.
-¿Qué materiales usó para el Concierto Buenos Aires ?
-En realidad, es el séptimo acto de City Opera Buenos Aires , una pieza de una hora para ensamble y video. Uno de los actos restantes, que no se verá esta vez en el San Martín, es un archivo sonoro de los ruidos de Buenos Aires. Son alrededor de 200 tomas de sonido que yo mismo hice en 2007 en lugares muy distintos entre sí: calles de diferentes barrios, restaurantes, iglesias, parques. Este archivo es también la base de la pieza para ensamble y video. Otra fuente importante fue una serie de grabaciones con la compositora y cantante Carmen Baliero sobre temas como la lluvia, las voces o el fútbol. Y, finalmente, el marco general es un video de Ian Kornfeld, una toma estática de la esquina de Anchorena y San Luis.
-En un artículo sobre la expresión, usted decía que el azar y la falta de intención eran un primer paso para escapar de la obra "absoluta" porque representaban una apertura respecto del encierro en sí mismo, pero a la vez afirma allí también que el sonido ya es de por sí expresión. Me gustaría que explicara cómo concibe el elemento expresivo en su música?-A partir del trabajo en mi propia música, aprendí que no existe percepción sin intención. ¡Si pudiéramos escuchar sin intención, no oiríamos nada! En este sentido, creo que hay muchísimos sonidos alrededor que no escuchamos porque no hay intención, porque no sabemos qué hacer con ellos ni por qué prestarles atención. Por otro lado, escuchar con intencionalidad implica crear una relación entre yo, el oyente, y el sonido (o la música). Y esto supone que en todo proceso de percepción está siempre en juego nuestra personalidad individual y sociocultural. Nunca seremos capaces de escuchar simplemente lo que "es"; siempre escucharemos también aquello que deseamos. Podríamos hablar de una "proyección": nos proyectamos a nosotros mismos, nuestras posibilidades, nuestra educación en los sonidos. Ésa es la razón por la que no podemos percibir los sonidos de otro modo que como expresivos: siempre nos cuentan algo. Los sonidos como meros sonidos son una ficción. Del mismo modo, concibo mi música como un proyecto de investigación; una investigación sobre la percepción. ¡Y sobre cómo la percepción nos crea!
-¿Qué diferencia establece entre el sonido y el ruido, o, en palabras de su idioma, entre Klang y Rauschen ?-Bueno, en relación con lo que comentábamos antes, yo diría que Klang está más vinculado con objetos (o instrumentos), con historias, con aspectos temporales, con el conocimiento, mientras que, en cambio, la naturaleza estática del Rauschen nos priva en parte de nuestra aplicación de conocimiento para el establecimiento de relaciones e intenciones. El ruido está menos predeterminado, lo que lo vuelve una maravillosa experiencia para el estudio de la percepción.
-¿Significa algo todavía la palabra "música" para usted?-La música está colmada de prejuicios. ¡Ésa es la parte divertida del asunto! Me gusta jugar con estos prejuicios y me gusta también la palabra "música", del mismo modo en que prefiero la palabra "compositor" más que "artista sonoro". Evidentemente, mientras existen los prejuicios existen también los límites. ¡Pero son justamente los límites los que me inspiran y me empujan a dar el próximo paso!
Ficha. El Ciclo de Música Contemporánea del Teatro San Martín, que incluye las presentaciones de Peter Ablinger, empezará el jueves 3 en el Colón, con un concierto dirigido por Alejo Pérez y dedicado a la obra de Edgard Varèse
Peter Ablinger- Voices & Piano
A portion of Peter Ablinger's massive cycle "Voices & Piano" (completion date yet to be determined), which constitutes post-spectral counterpoint and mimic of voice patterns of famous icons, performed on the piano, while the speech recordings are played back on tape. These are only selections; the entire cycle will likely comprise nearly six hours of material.
2- Gertrude Stein
3- Lech Walesa
4- Morton Feldman
5- Hanna Schygulla
6- Mao Tze-Dong
7- Guillaume Apollinaire
8- Bonnie Barnett
9- Jean-Paul Sartre
10- Martin Heidegger
11- Marcel Duchamp
12- Heimito von Doderer
13- Orson Welles
14- Mother Theresa
15- Rolf Dieter Brinkmann
16- Hanns Eisler
17- Ezra Pound
18- Ilya Prigogine
19- Pier Paolo Pasolini