Deep Purple : Machine Head
(1972. Wea/Warner)
Por Rodrigo Carvajal
Corría el año 1972 y Deep Purple lanzaba al mercado “Machine Head”, el tercer disco desde que Ian Gillan reemplazara a Rod Evans en las voces y Roger Glover a Nick Simper en el bajo. Esta formación, conocida como Mark II, y que además completaban Ian Paice en la batería, Jon Lord en los teclados y Ritchie Blackmore en la guitarra, es considerada como la más importante y prolífica de todas, pues la mayoría de los grande éxitos de la banda fueron compuestos por ella.
Así, en este álbum de siete canciones, encontramos temas que no sólo han perdurado en el tiempo, sino que se han transformado en verdaderos clásicos como ‘Highway Star’, ‘Smoke On The Water’, ‘Lazy’ o ‘Space Truckin’.
Después de “The Book of Taliesyn” (septiembre de 1968), “Shades of Deep Purple” (diciembre 1968) y el disco homónimo de 1969, que mostraban una faceta más sicodélica de la banda, caracterizada por la interpretación de covers (como las versiones de ‘Help’ y ‘We Can Work It Out’ de The Beatles), vino el debut de Gillan en “In Rock” de 1970 y luego en el potente “Fireball” de 1971; así cuando Deep Purple sorprendió con esta joya, confirmó el giro que estaba dando la agrupación, con riffs más pesados, que ya se podían apreciar en canciones como ‘Fireball’ y ‘Speed King’, dejando de lado los elementos sinfónicos y orquestales que los había caracterizado, sobre todo en el “Concerto For Group and Orchestra”, creado por Lord en 1970 y que significó el debut de Gillan en la banda.
“Machine Head” fue grabado en el Grand Hotel de Montraux con el Rolling Stone Mobile Studio, entre el 6 y el 21 de diciembre de 1971 y constituyó todo un acontecimiento para la época, destacando por su potencia y perfecta ejecución, siendo considerada en la posteridad como una de las piezas precursoras de lo que posteriormente sería el heavy metal tradicional.
Cómo no recordar el clásico riff que da la entrada a ‘Smoke On The Water’, los desgarradores gritos de Gillan, el virtuosismo de Lord y Blackmore en ‘Highway Star’ y ‘Lazy’ o la perfecta base de Glover y Paice a lo largo de todo el álbum. Pero eso no es todo, la placa trae mucho más y sorprende a medida que pasan las canciones y avanzan los minutos; pasemos a revisar uno de los discos más influyentes de la música contemporánea y que le dio significado a una nueva forma de hacer rock, más duro y visceral: el ya conocido Hard Rock.
El largaduración no puede empezar de mejor manera con la clásica ‘Highway Star’. Aquí destacan, sin lugar a dudas, Lord y Blackmore, quienes con espectaculares “solos” le dan el toque preciso para transformar a una canción con simples acordes, en un gran tema que abre el apetito para seguir escuchando más y mejor calidad. De hecho, este punteo de guitarra es prácticamente el único que se conserva intacto en las presentaciones en vivo, donde cada uno improvisaba al máximo y se retaba entre sí para superarse en habilidad.
El segundo track es la poco conocida ‘Maybe I'm a Leo’, una canción con un ritmo más pausado que descansa en la interpretación de una variada batería y que sirve como preludio de lo que vendrá, pues el siguiente tema es ‘Picture Of Home’, que es el fiel reflejo de todo lo que representa Deep Purple como banda, virtuosismo y calidad compositiva. Ella comienza con una espectacular introducción de batería, donde Paice combina armoniosamente el sonido de la caja, los toms y el bombo; esto se complementa con la gran voz de Gillan y un nuevo “solo” de Blackmore. Pero la canción no termina ahí, pues aún queda la mejor parte; tras una brillante sucesión de escalas del genio creativo de Lord, llega el turno de Glover quien se despacha un correcto “solo” colmado de limpieza y pulcritud. De esta manera se conjugan los elementos característicos del grupo, transformándose ‘Picture Of Home’, en un resumen de lo que cada músico puede lograr.
La cuarta canción, ‘Never Before’, es más reposada y con un ritmo más pegagoso, pero al igual que ‘Maybe I’m a Leo’, genera el clima adecuado para el remate del disco. Éste empieza con la clásica y archiconocida ‘Smoke On The Water’, que en su lírica relata el momento en que se incendió el casino Montreaux mientras la banda presenciaba la actuación de Frank Zappa & The Mothers of Invention: “Smoke on the water, a fire in the sky”. Esta canción se ha convertido en uno de los mayores éxitos de Deep Purple y las cuatro notas que sirven de introducción, se han transformado en un referente de cómo la simpleza puede ir de la mano de un tema de gran calidad.
Posteriormente el álbum sigue con 'Lazy', donde un saturado teclado da la partida a más de 7 minutos de Rock & Roll y potencia, que muestra a un Blackmore inspirado y adquiriendo cada vez más protagonismo, demostrando toda su calidad con las seis cuerdas; así junto a la desgarradora voz de Gillan, que además toca la armónica, preparan el desenlace para esta aventura de más de media hora, que se da finalmente con ‘Space Truckin’, un tema cargado de energía que comienza con un distorsionado teclado y que logra cautivar durante 4 minutos y medio, a través de una guitarra llena de onda y una potente batería perfectamente complementada con el bajo de Glover. Mención aparte merece Gillan, cuyo registro parece ser sacado de alguna ópera, más que de un grupo de Hard Rock, por lo que le otorga el sello de distinción que hace de Deep Purple una banda inconfundible y pionera en el estilo.
Sin duda un disco perfecto, que combina potencia y calidad, con excelente interpretaciones, haciendo de éste un álbum sin altibajos y que atraviesa por distintas intensidades, logrando un sonido armonioso y cohesionado. Esta sería una característica importante dentro de la música de este grupo, que con la contribución de cada uno de sus integrantes, aportan con lo necesario para hacer de este disco uno de los clásicos de la historia del Rock & Roll.
http://www.rockaxis.com/rock/cd-clasico-rock/deep-purple-machine-head/
(1972. Wea/Warner)
Por Rodrigo Carvajal
Corría el año 1972 y Deep Purple lanzaba al mercado “Machine Head”, el tercer disco desde que Ian Gillan reemplazara a Rod Evans en las voces y Roger Glover a Nick Simper en el bajo. Esta formación, conocida como Mark II, y que además completaban Ian Paice en la batería, Jon Lord en los teclados y Ritchie Blackmore en la guitarra, es considerada como la más importante y prolífica de todas, pues la mayoría de los grande éxitos de la banda fueron compuestos por ella.
Así, en este álbum de siete canciones, encontramos temas que no sólo han perdurado en el tiempo, sino que se han transformado en verdaderos clásicos como ‘Highway Star’, ‘Smoke On The Water’, ‘Lazy’ o ‘Space Truckin’.
Después de “The Book of Taliesyn” (septiembre de 1968), “Shades of Deep Purple” (diciembre 1968) y el disco homónimo de 1969, que mostraban una faceta más sicodélica de la banda, caracterizada por la interpretación de covers (como las versiones de ‘Help’ y ‘We Can Work It Out’ de The Beatles), vino el debut de Gillan en “In Rock” de 1970 y luego en el potente “Fireball” de 1971; así cuando Deep Purple sorprendió con esta joya, confirmó el giro que estaba dando la agrupación, con riffs más pesados, que ya se podían apreciar en canciones como ‘Fireball’ y ‘Speed King’, dejando de lado los elementos sinfónicos y orquestales que los había caracterizado, sobre todo en el “Concerto For Group and Orchestra”, creado por Lord en 1970 y que significó el debut de Gillan en la banda.
“Machine Head” fue grabado en el Grand Hotel de Montraux con el Rolling Stone Mobile Studio, entre el 6 y el 21 de diciembre de 1971 y constituyó todo un acontecimiento para la época, destacando por su potencia y perfecta ejecución, siendo considerada en la posteridad como una de las piezas precursoras de lo que posteriormente sería el heavy metal tradicional.
Cómo no recordar el clásico riff que da la entrada a ‘Smoke On The Water’, los desgarradores gritos de Gillan, el virtuosismo de Lord y Blackmore en ‘Highway Star’ y ‘Lazy’ o la perfecta base de Glover y Paice a lo largo de todo el álbum. Pero eso no es todo, la placa trae mucho más y sorprende a medida que pasan las canciones y avanzan los minutos; pasemos a revisar uno de los discos más influyentes de la música contemporánea y que le dio significado a una nueva forma de hacer rock, más duro y visceral: el ya conocido Hard Rock.
El largaduración no puede empezar de mejor manera con la clásica ‘Highway Star’. Aquí destacan, sin lugar a dudas, Lord y Blackmore, quienes con espectaculares “solos” le dan el toque preciso para transformar a una canción con simples acordes, en un gran tema que abre el apetito para seguir escuchando más y mejor calidad. De hecho, este punteo de guitarra es prácticamente el único que se conserva intacto en las presentaciones en vivo, donde cada uno improvisaba al máximo y se retaba entre sí para superarse en habilidad.
El segundo track es la poco conocida ‘Maybe I'm a Leo’, una canción con un ritmo más pausado que descansa en la interpretación de una variada batería y que sirve como preludio de lo que vendrá, pues el siguiente tema es ‘Picture Of Home’, que es el fiel reflejo de todo lo que representa Deep Purple como banda, virtuosismo y calidad compositiva. Ella comienza con una espectacular introducción de batería, donde Paice combina armoniosamente el sonido de la caja, los toms y el bombo; esto se complementa con la gran voz de Gillan y un nuevo “solo” de Blackmore. Pero la canción no termina ahí, pues aún queda la mejor parte; tras una brillante sucesión de escalas del genio creativo de Lord, llega el turno de Glover quien se despacha un correcto “solo” colmado de limpieza y pulcritud. De esta manera se conjugan los elementos característicos del grupo, transformándose ‘Picture Of Home’, en un resumen de lo que cada músico puede lograr.
La cuarta canción, ‘Never Before’, es más reposada y con un ritmo más pegagoso, pero al igual que ‘Maybe I’m a Leo’, genera el clima adecuado para el remate del disco. Éste empieza con la clásica y archiconocida ‘Smoke On The Water’, que en su lírica relata el momento en que se incendió el casino Montreaux mientras la banda presenciaba la actuación de Frank Zappa & The Mothers of Invention: “Smoke on the water, a fire in the sky”. Esta canción se ha convertido en uno de los mayores éxitos de Deep Purple y las cuatro notas que sirven de introducción, se han transformado en un referente de cómo la simpleza puede ir de la mano de un tema de gran calidad.
Posteriormente el álbum sigue con 'Lazy', donde un saturado teclado da la partida a más de 7 minutos de Rock & Roll y potencia, que muestra a un Blackmore inspirado y adquiriendo cada vez más protagonismo, demostrando toda su calidad con las seis cuerdas; así junto a la desgarradora voz de Gillan, que además toca la armónica, preparan el desenlace para esta aventura de más de media hora, que se da finalmente con ‘Space Truckin’, un tema cargado de energía que comienza con un distorsionado teclado y que logra cautivar durante 4 minutos y medio, a través de una guitarra llena de onda y una potente batería perfectamente complementada con el bajo de Glover. Mención aparte merece Gillan, cuyo registro parece ser sacado de alguna ópera, más que de un grupo de Hard Rock, por lo que le otorga el sello de distinción que hace de Deep Purple una banda inconfundible y pionera en el estilo.
Sin duda un disco perfecto, que combina potencia y calidad, con excelente interpretaciones, haciendo de éste un álbum sin altibajos y que atraviesa por distintas intensidades, logrando un sonido armonioso y cohesionado. Esta sería una característica importante dentro de la música de este grupo, que con la contribución de cada uno de sus integrantes, aportan con lo necesario para hacer de este disco uno de los clásicos de la historia del Rock & Roll.
http://www.rockaxis.com/rock/cd-clasico-rock/deep-purple-machine-head/
Deep Purple - Highway Star - Machine Head (1972)